El ministro de Salud Pública, Julio Mazzoleni, confirmó este miércoles que no recomendarán al Gobierno Nacional la imposición de ninguna medida restrictiva especial para las fiestas de fin de año por el aumento de las cifras del COVID-19. En ese sentido, volvió a implorar a la ciudadanía el cumplimiento de las medidas básicas para evitar el contagio del virus y que “nadie falte en la mesa de Navidad o fin de año”.
El alto funcionario expuso esta mañana en entrevista con periodistas, que hay muy pocas cuestiones que se encuentran restringidas y que los sectores económicos pueden trabajar sin problemas. En ese sentido, mencionó que lo único que piden desde la cartera sanitaria es que se usen tapabocas y que se respeten las medidas sanitarias.
“Los hospitales de referencia estamos al tope, las camas están ocupadas. Esto es dinámico, se renuevan los pacientes, hay alta, pero hay gente que está esperando para ser ingresada a terapia también. Y la demanda la tienen todos los ámbitos, en el sector privado es realmente muy alta a pesar del enorme crecimiento que se ha dado. Pero eso nunca va ser suficiente si no tomamos las medidas correspondientes”, expuso.
Mazzoleni agregó que desde Salud están haciendo todo lo posible para dotar de más personal a los diferentes nosocomios públicos. “Hemos contratado todo lo disponible, y vamos a seguir con la fuerza y elementos que tengamos. Lo que pedimos es que también del otro lado haya ese compromiso que sigo creyendo que es mayoritario, pero que claramente estamos subestimando, estamos entrando en una etapa muy difícil de la pandemia”, explicó.
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Cómo nos reunimos es fundamental
En ese sentido, recordó que las recomendaciones de cuidarse entre todos son las mismas, porque hoy la situación realmente está complicada. “Aprovecho para remarcar algunos factores. Por ejemplo, tenemos que tener en cuenta el número de eventos que tenemos en una semana; cuando mayor es, mayor es el riesgo. Cuando hay más gente en esos eventos, aumenta el riesgo. Si el lugar es abierto o cerrado, y cuando mayor es el tiempo que pasamos, también repercute”, indicó.
El ministro refirió que están moldeando estas recomendaciones porque saben que son inevitables las reuniones, pero que por lo menos se desarrollen tomando en cuenta estas recomendaciones. “Porque realmente queremos que no falte nadie en la mesa de Navidad o Año Nuevo y para que ello ocurra, debemos disciplinarnos. Necesitamos que la conciencia predomine. Hay lugares donde la Policía, la Fiscalía y Salud no van a poder llegar, pero el virus sí. Y a todos nos va a tocar”, aseveró.
Por último, reiteró que las restricciones vigentes desde el punto de vista económico para su implementación son bajas, por lo que no hay excusas para portar tapabocas y aplicar el lavado de manos, distanciamiento físico y otros. “Pero su costo de incumplimiento es enorme”, culminó.
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