Ciudad del Este. Agencia Regional.

Tras el jolgorio inicial generado en algunos sectores del área metropolitana de Alto Paraná por la apertura del Puente de la Amistad para todo tipo de vehículos y la posibilidad de mejorar el golpeado comercio de Ciudad del Este, aparecen algunos análisis que muestran las variantes que pueden darse.

“La euforia se irá convirtiendo en angustia o en felicidad de acuerdo al volumen de gente que entre a Ciudad del Este”, dijo el empresario Omar Airaldi. Explicó que “la euforia viene de haber logrado la apertura del puente desde ayer después de siete meses, pero detrás vendrán los problemas”.

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Citó algunos de los inconvenientes como, por ejemplo, el hecho de que “no hay stock, hay muchos productos que ya salieron de su efervescencia tecnológica y no se va a comprar porque no hay tiempo de compra para fin de año”. Aclaró que esos problemas se verán realmente cuando el turista no encuentre lo que está buscando.

“Otro inconveniente es que se está debiendo mucho y por el solo hecho de abrirse el puente, los acreedores harán fila para cobrar y eso va a generar una desesperación”, manifestó Airaldi recordando por qué habló de una euforia inicial que puede cambiar rápidamente.

Consultado sobre la cotización del dólar como un aspecto que atenta para que los brasileños vengan al país en masa, Omar Airaldi, dijo que la diferencia de cotización es solo circunstancial y que el verdadero aspecto que afecta para el consumo que se espera “es que cada vez hay menos reales en el bolsillo de la gente”.

Sin embargo, como previsión positiva recordó lo ocurrido entre las ciudades fronterizas Santa do Livramento (Brasil) y Rivera (Uruguay) donde la apertura mejoró sustancialmente el comercio y que eso también puede ocurrir en Ciudad del Este.

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“El 5 de setiembre se abrió allá entre la frontera brasileña y uruguaya y para el 30 de setiembre ya fue vendido el 250% más que todo el 2019”, dijo Airaldi. Agregó que “también tuvieron un tiempo prolongado de cierre y aquellos que se dedican a eso no tenían donde comprar y se agolparon allí”.

“Nosotros quizás tenemos en toda la frontera unos 7 a 8 millones de compradores que es igual a la población de Paraguay, pero para Brasil es solo un suspiro. Pero esa poca cantidad que puede ser, dentro de la población de Brasil, en el comercio fronterizo de Paraguay es mucho. Ya lo demostraron en Uruguay que puede ser efectivo y allá fueron 1.500 kilómetros más para poder comprar. Acá se ahorrarán esa distancia”, sostuvo el empresario.