Mediante una serie de entrevistas, La Nación ofrece un espacio de abordaje mano a mano con protagonistas de diversos temas que interesan a la ciudadanía. En la oportunidad, contactamos con la jefa de Psicología del Cenquer, Lic. Alba Perdomo, quien está trabajando con la coordinación de la línea 146 que brinda contención psicológica a trabajadores de salud.
La pandemia desatada por el COVID-19 trajo consigo una importante cantidad de problemas relacionados a la salud mental debido a la incertidumbre, miedo y ansiedad que genera. Una población bastante afectada en este sentido, por ser parte de la primera línea de combate contra el virus pandémico, es la de los profesionales de blanco. En esta ocasión, y en el marco del Día Mundial de la Salud Mental, que se conmemora cada 10 de octubre, abordamos la situación por la que atraviesan.
A inicios de abril fue habilitada la línea telefónica gratuita 146 SMP (Salud Mental para el personal de la Salud). La misma está disponible las 24 horas para el personal de blanco y auxiliares que brindan atención a pacientes con COVID-19. La central telefónica funciona en el Centro de Quemaduras y Cirugías Reconstructivas “Dr. Amado Bendlin” (Cenquer) y se encuentra a cargo de psicólogos del Cenquer, Instituto de Bienestar Social, de la Dirección de Beneficencia y Ayuda Social (Diben), Instituto de Previsión Social (IPS) y voluntarios.
¿Cuál es la situación de salud mental de profesionales de blanco?
La línea 146 es Salud Mental para Profesionales de la Salud con la que empezamos en abril y tenemos 2.028 llamadas a la fecha. Es una cifra que va cambiando minuto a minuto, porque 24 horas es la atención. Al principio era solo para blanco, pero al final atendemos a todos, porque la gente llama, por ejemplo, porque está irritada con el vecino que no cumple con las normas, otros porque están en estado de depresión y de carencia porque viven con sus padres, además de situaciones puntuales a las que hay que dar una rápida contención.
Otros llaman de distintos puntos del país a pedir camas. El 50% son gente de blanco, no todos recurren y no todos quieren hacer la llamada. Este es un momento en que todos debemos ayudarnos y apoyarnos para salir adelante. La gente está muy ansiosa, con miedo, con ira, tristeza, irritabilidad, algunos tienen trastorno de sueño, algunos por duelo.
¿Cuáles son los motivos de consulta y de qué sector?
La pandemia es como la gota que colmó el vaso. Los profesionales de salud están con agotamiento físico y mental, la mayoría tiene dinero porque trabajan en 2 o 3 partes, pero no tienen tiempo, un tiempo para ellos.
De todas las áreas consultan, pero la mayor cantidad son del sector de enfermería y terapistas, especialmente mujeres. Algunos llaman 2 o 3 veces por semana, otros cada 15 días. Se hace una terapia de apoyo. Varios profesionales acuden de manera presencial como seguimiento del tratamiento.
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¿En qué consiste la atención que brindan?
Las enfermeras jefas por ejemplo nos llaman y nos preguntan si podemos hacer alguna intervención, nosotros generalmente les ayudamos en lo que está a nuestro alcance y una vez que están tranquilas, ya no hay problema, porque si vos estás tranquila le ayudás al otro. Si no, le podés contagiar el miedo, las emociones se contagian. Tiene que ser una escucha activa y tenés que estar bien, no asustarte.
La regla es comer bien, hacer ejercicios, descansar, dormir bien porque cada uno necesitamos ciertas horas. Un adulto joven generalmente 8 horas, un adulto mayor entre 4 a 6 horas ya es suficiente. También están los cambios de horario, no duermen bien los profesionales y eso genera una discordancia dentro de su organismo, cambia su reloj biológico. No tenemos psiquiatras en el hospital, pero sí derivamos cuando hay necesidad.
Notamos que van mejorando, les recomendamos libros, técnicas de relajación, respiración, visualización. Tratamos de que hagan un cambio en su forma de diálogo interno, porque tu actitud y diálogo interno es lo que hace la diferencia. No son las situaciones que nos llevan a la ansiedad, depresión, sino cómo encaramos las situaciones.
Hay que ver como un reto y no pensar tanto en el futuro, porque es un poco desconocido todavía y crea mucha inestabilidad. Nosotros generalmente les hacemos preguntas, qué dificultades tienen. Cuando nos dicen dificultades para dormir, entonces les damos algunos tips de lo que pueden hacer y vemos si tienen pensamientos muy obsesivos, preocupantes, tratamos de que pongan una imagen o una palabra en la mente, porque nosotros pensamos a través de imágenes y palabras. La respiración consciente también es muy buena.
Mensaje a los profesionales de salud
Tienen que romper ese prejuicio, ese miedo, asumir la realidad y buscar ayuda, porque todos necesitamos en algún momento ayuda. A veces hace falta que se te escuchen nomás y consultar con un psiquiatra o un psicólogo no es sinónimo de que estás trastornado, sino que tenés una dificultad en tu vida y si estás buscando ayuda es porque te das cuenta, estás bien.
El que no se da cuenta, no busca ayuda. Cuando uno no es feliz, necesita un psicólogo. Tenemos conocimiento de lo que es la parte mental, física, tenemos un estudio profundo de lo que es la parte antropológica, sociológica, bien completa es nuestra preparación.