A pesar de las adversidades, encontró el lado positivo de la vida y sostiene que todo lo bueno llega a su debido tiempo. Un joven de 28 años, oriundo de Mbocayaty, Guairá, tuvo que atravesar momentos muy difíciles a su corta edad, pero esos hechos lo motivaron a ser hoy día parte del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay (CBVP).
Víctor Alejandro Jorgge Duré, más conocido por su apellido Jorgge, contó a La Nación que hace 1 año fundó el Cuerpo de Bomberos de Mbocayaty K37, que actualmente cuenta con 17 voluntarios. “Somos miembros del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay (CBVP). Estamos activando con ayuda de la gente y de las compañías vecinas, ya que este tema es muy delicado. Cuando ocurre algún suceso, la vida de algún prójimo está en las manos de uno. Pero estamos trabajando y gracias a la sensibilización de la gente, se están acercando muchos jóvenes para poder ser parte del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Mbocayaty”, expresó.
Víctor relató que desde su primer accidente, empezó el tema de servicio en la comunidad, hacia otra gente que necesita. “Tuve accidentes de los cuales tuve la fortuna de seguir con vida. Aprendí muchas cosas y de ahí surgió la idea de transmitir a otra gente y ayudar”, indicó.
Comentó que al principio ayudaba a la gente con discapacidad a hacer gestiones en la Senadis, conseguir prótesis, silla de ruedas, certificado de discapacidad. Después surgió la idea de hacer un servicio en su propia comunidad y por medio del CBVP, ya que cada año era mayor el perjuicio en esta época en cuanto a incendio de cañaverales, de cultivos, accidentes con muerte por falta de asistencia de bomberos, por lo que crearon el K37 en Guairá.
Una difícil decisión a los 14
El joven dijo que el primer accidente fue en el 2007, el 1 de enero durante un festejo familiar, donde un vehículo de la familia se movió del estacionamiento y le apretó por un árbol. “Ahí fue cuando perdí la pierna derecha. En dicha ocasión fue la primera vez que fui auxiliado por los bomberos amarillos. En el 2007 estaba mi papá nomás, mi mamá estaba en España cuando eso y no sabía nada de lo que estaba pasando”, recordó.
Atravesaron una delicada situación económica con todos los gastos. Estuvo internado en Asunción un mes, en Emergencias Médicas, y tras una decisión suya para una pronta y mejor recuperación, decidió que le amputen la pierna. Víctor le pidió al médico que le muestre cómo quedaría si le amputaban la pierna. “Me mostró todo y le dije que estábamos alargando sin motivos y que representaban muchos gastos también, y decidí que me corte para poder seguir adelante”, expresó.
Rescató que eso fue lo bueno, el haber podido decidir él y no dejar la carga a otra persona. Para su cumpleaños, el 27 de abril, luego de fisioterapia y todo el proceso, Víctor ya estaba caminando con la prótesis y para el 14 de mayo, en el desfile del colegio, él ya estaba desfilando con sus compañeros.
Accidente laboral
Tiempo después, en el 2012 y ya con la prótesis, tuvo un accidente laboral. Él es funcionario público y cuando se estaba yendo a su trabajo en moto, fue atropellado por un vehículo particular.
“Ahí fue que recibí una fractura en el fémur, justo el lado que no tengo toda la pierna, politraumatismo de cráneo encefálico, fractura en la muñeca derecha, todos los golpes en el mismo lado. Ése sí fue un largo tiempo de recuperación y estuve en terapia intensiva. Según mi expediente de IPS que tengo, pasé por sala de reanimación también en 2 ocasiones. Eso me llevó 3 años en recuperar todo, sobre todo la parte de la cabeza”, explicó.
Víctor aseguró que en ese lapso aprendió muchísimas cosas. “Después de ese accidente, estando por Asunción, estuve en muchos cursos, hasta me consagré mejor emprendedor del Paraguay y me fui a representar al país en el Foro de Emprendedores en Córdoba”, remarcó.
Leer también: Ejemplo de superación: pinta murales y paisajes sobre lienzo para salir adelante
La discapacidad y la discriminación
En otro momento, Víctor habló también acerca de la triste realidad que viven las personas con discapacidad. El no contar con veredas en buen estado, inclusivas, la discriminación de las personas, los colectivos que no te alzan si estás en silla de ruedas, etc.
“La discapacidad no es nada malo, inclusive, te hace conocer habilidades que tenías y que sin una discapacidad no estarías descubriendo, pero hay que tener una fortaleza. No para vivir con la discapacidad, sino para vivir con discapacidad dentro de nuestra sociedad, ese es el reto que tiene una persona con discapacidad. Nuestra sociedad es muy discriminativa”, lamentó.
Así también, el joven mencionó que tiene 2 hijos, uno de 7 años y el más pequeño cumplió 1 año el domingo. Víctor, además es estudiante de 2 año de ingeniería en Zootecnia y está contento con eso, ya que según manifestó, viene del campo, de trabajar con la tierra, animales, siguiendo esa rama se abocó a dicha carrera.
Por último, destacó que cada cosa que se presenta en la vida tiene su lado positivo. “A lo mejor hoy no, pero es cuestión de ver a lo largo del tiempo”, añadió el ejemplo de superación de la semana.