El doctor Roque Silva, director de la XI Región Sanitaria, considera que la situación que vive el país con la llegada al pico de la pandemia conlleva mayor responsabilidad de todos los ciudadanos, en cuanto a los cuidados necesarios para evitar el contagio. Adelantó que el COVID-19 vino para quedarse, por lo tanto, habrán hábitos con los que vamos a tener que vivir, como el uso de tapabocas.

“Cerramos agosto con un promedio de 1300 casos de coronavirus en Central que salió a 2.500 en la primera semana de septiembre”, expresó el profesional en contacto con el programa La Nación live, emitido por Universo 970 Am y canal GEN.

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A partir de esto, manifestó que se estaría dando una especie de maceta en la curva, que sería el anuncio de la disminución de contagios. “Con estos números podemos decir y creer que estamos en la parte alta de la curva, que tenga como una maceta de casos diarios”, añadió.

Pero aclaró que para que esta curva de contagios empiece a bajar “necesitamos que la gente extreme cuidados”.

Además, el profesional manifestó que el modo COVID de vivir ya debe instalarse en la mente de todos, comenzando por el uso de tapabocas, que debe formar parte de la vida diaria de todos.

“Vamos a tener que vivir con tapabocas”, indicó. Así como también adecuar las costumbres a las exigencias que requiere la llegada de este virus, como en el caso del consumo del tereré, que ya no se podrá compartir masivamente, sino solo dentro de los núcleos familiares.

El Ministerio de Salud procesó 3.031 muestras hoy sábado, de las cuales 696 dieron positivo al COVID-19; todos por contagio comunitario. Además, se dio a conocer la cantidad de fallecidos a consecuencia del virus, que fueron 21 víctimas, totalizando de esta manera 782 personas que perdieron la vida a causa de la enfermedad.

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