Un joven de 17 años fue encontrado sin vida en un predio baldío del asentamiento Kokuere de la ciudad de Itá, en la noche del miércoles pasado. Se trata de un menor llamado Giovani Benítez, reciclador y vendedor ambulante, que para robarle su teléfono celular habría sido golpeado en la cabeza con un objeto contundente que derivó en su fallecimiento. El presunto autor ya fue detenido.
La víctima es un menor de edad con discapacidad que vendía juegos de azar para poder ayudar a su abuela. Luego de conocer el final trágico, una parte de la población de Itá se manifiesta frente a la comisaría local, donde bloquea la Ruta PY-01, para reclamar justicia por el joven al que consideran “hijo de la ciudad”. Hoy Giovani habría cumplido 18 años.
La población de la zona conoció el caso en la tarde de ayer luego que su desaparición se hiciera pública y manifestó su preocupación frente a la dependencia policial. El supuesto autor del crimen tiene el alias de Emilio Amarilla alias “Emilio’i”, quien fue detenido esta mañana. Este habría matado al menor para robar su teléfono celular y el poco dinero de la recaudación que tenía en su poder.
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Mientras que durante la madrugada unas tres personas se acercaron a la comisaría jurisdiccional para devolver el teléfono de la víctima, ante las sospechas también quedaron detenidas, ya que habría comprado el aparato celular de parte del homicida. En total son 4 los apresados, pero ya fue identificado el presunto autor del crimen.
“Quien se acercó a hacer la denuncia tenía antecedentes por reducción, lo que es bastante sospechoso. La persona que cayó detenida ahora no tiene antecedentes. El caso prácticamente está cerrado, gracias a Dios tenemos todos los elementos y ya tenemos detenido al supuesto autor”, expresó la fiscala Deisy Sánchez, sobre homicidio del joven, en contacto con 730 AM.
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Giovanni vendía juegos de azar en la vía pública para ayudar a su anciana abuela, y desde niño salía a las calles para la recolección de materiales para el reciclado. Ahora solicitan a los manifestantes que se retiren de la comisaría para trasladar a los apresados hasta la sede fiscal para dar su declaración testifical.