El tribunal compuesto por las magistradas Gloria Hermosa, Mesalina Fernández y Alba González condenó a 12 años de cárcel a Teodora López por el hecho punible de trata de personas, así como a sus ayudantes María Haydee Bogado a seis años, y Evaristo López (hermano de la cabecilla) a cinco años. La Fiscalía de la Unidad Internacional de Trata de Personas celebró que la condena se haya realizado sin el testimonio de las ocho víctimas paraguayas que fueron explotadas sexualmente en España, evitando así la revictimización de las mujeres, manifestó Claudia Morys, fiscala del caso.
En un operativo conjunto entre la Fiscalía de Paraguay y la de España denominado “Plaga”, en noviembre de 2015 fueron rescatadas un total de ocho paraguayas que habrían sido explotadas sexualmente en un club nocturno denominado “Generación Latina”. Fueron también rescatadas otras dos mujeres de otras nacionalidades. Esto se logró con la valentía de una de las compatriotas que logró escapar y dio aviso a las autoridades.
Leé más: Paraguay accederá a 2.900.000 vacunas contra el COVID-19: “Serán 2 dosis por persona”
Con la ayuda de esta víctima y las autoridades españolas, se pudo realizar la investigación. Se interceptaron los teléfonos de la reclutadora Teodora López y sus colaboradores, mediante la escucha telefónica se supo de todo el esquema de la red que se dedica a traficar mujeres vulnerables, de escasos recursos y con escasa educación para enviarlas bajo engaño a España, donde las condiciones eran deleznables.
López, cabecilla de la red, quien ya contaba con antecedentes por el mismo hecho, se encargaba de la captación de las mujeres, así como el traslado a España, por lo que fue condenada en el país. Mientras que los dueños del club nocturno de Cuenca, España, Rodi Vargas y María Alejandra Fernández Portillo fueron castigados en su país por el acogimiento ilegal de las compatriotas.
La fiscal Morys explicó que el hecho punible de trata de personas es un delito internacional que tiene tres etapas: la primera es la captación, que es convencer bajo engaños a la persona de ir a trabajar a otro país y al llegar allá el trato es otro. Por eso este hecho punible es denominado trata de personas. Luego de lograr manipular a la víctima, el segundo paso es el traslado. En algunos casos los reclutadores secuestran los documentos de la víctima sin que estas puedan movilizarse en el país extranjero.
Te puede interesar: Abandonan herido a presunto sicario que participó de mortal atentado
El tercer paso de la trata es el acogimiento, en el que los reclutadores terminan el trabajo y las personas que esperan a las mujeres con violencia las toman y las explotan sexualmente sin su consentimiento.
“Es importante que nuestros compatriotas sepan cómo operan estas redes de trata de persona, ellos se aprovechan de la vulnerabilidad especialmente de mujeres, que necesitan dinero, que cuentan con escasa formación. De esta forma no se repetirán este tipo de hechos que dejan muy mal a nuestras compatriotas y a sus familias”, indicó Morys.