La prioridad para ser sometidos al hisopado para determinar los casos de COVID-19 la tienen personas que presentan síntomas respiratorios, pero además se tiene en cuenta si presentan enfermedades de base como diabetes o hipertensión para ser sometidos antes que otros, informaron desde el Ministerio de Justicia, luego del aumento de casos en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú y tras la denuncia de familiares de un interno, quien supuestamente presenta síntomas respiratorios, pero no presenta enfermedades de base ni tampoco fiebre, como informaron desde la Sanidad del penal.
Aldo René Ibarra Cubilla es un interno de la Penitenciaría Nacional de Tacumbú que se encuentra en el sector de la baldosería y comentó a sus familiares que tiene síntomas de COVID-19 desde hace aproximadamente ocho días. El mismo comunicó a sus familiares, vía telefónica, que tiene problemas para respirar, que ha perdido el sentido del gusto y el olfato, por lo que está convencido de haber contraído la enfermedad. Esto es lo denunciado por sus familiares, por lo que recurrimos al Ministerio de Justicia para averiguar con exactitud la situación.
Inicialmente, un familiar cercano nos comentó que únicamente desean que su pariente sea atendido como correspondería a un posible caso de coronavirus, al menos por los síntomas que dice presentar. También informó que ya fue revisado por personal médico de la Sanidad del penal y le dijeron que su caso podría ser una “situación psicológica”, al tiempo de expresar su preocupación no solo por su familiar preso en Tacumbú, sino por los demás integrantes de la familia que están sufriendo con esta situación.
En la mañana del domingo, un interno de nombre Juan Leguizamón, quien se dedicaba a la venta de remedios yuyos, se desvaneció de manera súbita en el interior de su celda, en el mismo sector donde se encuentra Ibarra. El personal médico auxilió a Leguizamón de manera inmediata, pero ya nada se pudo hacer para salvarle la vida. La ministra de Justicia, Cecilia Pérez, había anunciado que el interno fallecido presentaba obesidad mórbida, era hipertenso y no presentaba síntomas de enfermedades respiratorias, aunque igual sería sometido al análisis en la morgue para determinar si había contraído el virus.
Desde el Ministerio de Justicia confirmaron la existencia de internos con síntomas respiratorios en varios sectores de la Penitenciaría Nacional y estaban aguardando los resultados de las pruebas a las que fueron sometidas otras personas mientras se reforzaba la atención médica. El viceministro de Política Criminal, Rubén Maciel, señaló el viernes pasado que ya eran 52 los casos positivos del COVID-19 en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú y el brote se había iniciado la semana pasada en el pabellón Remar. Los análisis para determinar la presencia o no del COVID-19 se realizan de lunes a viernes por personal del Ministerio de Salud Pública.