“¡Quiero conocer a mi superhéroe!”, decía con insistencia el niño Johan Diosmar Ruiz a su tío, un integrante de la Agrupación Montada de la Policía Nacional. Y es así que este domingo el suboficial primero Evelio Brítez decidió complacer el pedido llevando a su sobrino a conocer el cuartel del Grupo Lince, donde compartió un momento inolvidable con sus superhéroes de la vida real.

El pequeño no solo disfrutó de ver de cerca a sus entrañables amigos, sino que además vistió el uniforme y portó el aparato walkie radio, convirtiéndose por unos instantes en un integrante más de su querido Lince. Tras tomarse unas fotos con los agentes, Johan aseguró que cuando sea grande será como uno de ellos.

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Es que con este loable gesto de acercamiento y familiarización, el Grupo Lince busca cambiar esa percepción de la gente que durante la época de la dictadura veía a un uniformado como una amenaza que transmite espanto y temor, e inclusive dolor por las torturas practicadas en las dependencias policiales a quienes osaban enfrentar el régimen.

Desde la jefatura inclusive se está trabajando en la implementación de un proyecto denominado “Día del Lince”, para que los niños vayan hasta el cuartel y puedan compartir una jornada de distensión en compañía de sus ídolos o superhéroes.

“Nosotros tenemos un proyecto que vamos a elevar por el conducto correspondiente para que la gente y los chicos tengan un día del Lince, que vengan a pasar un día con sus héroes. Y justamente hoy el tío que es un suboficial tuvo tiempo también y le trajo a compartir un rato con los muchachos”, comentó a La Nación el comisario principal Gustavo Ramón Ruiz Díaz Noguera, jefe del área central de la Unidad de Operaciones Tácticas Motorizadas de la Policía Nacional, o Grupo Lince.

El jefe de los agentes especializados explicó que la idea es cambiar la imagen negativa que viene del pasado contra los efectivos policiales. “Es cambiar esa imagen que se tenía en la dictadura, del ‘cháke policía’. Nosotros también somos personas de bien que hacemos muchos trabajos de beneficencia y queremos tener ese acercamiento con la sociedad. Pero por supuesto que dentro de nuestro actuar también está el procedimiento contra las personas que están cometiendo acciones fuera de la ley”, comentó.

“Queremos cambiar esa percepción que algunos todavía tienen, pero en gran mayoría ya ha mejorado”, significó.

A través del proyecto se permitirá que los niños presencien la rutina de los linces, integren la formación y escuchen las tareas encargadas a los agentes, además de propiciar un momento de oración. Y finalmente, tras esta experiencia, compartirán un almuerzo con el grupo como corolario de la actividad.

“Eso vamos a ir puliendo, en vista que no podemos tener aglomerada a la gente por la pandemia. Una vez que se habilite, nosotros vamos a difundir para que la gente se inscriba para venir a compartir un día de Lince con nosotros en nuestro hermoso cuartel”, refirió.

Ruiz Díaz precisó que cambiar la imagen es la consigna, ya que hay madres que todavía usan a la Policía como un instrumento de temor y elemento de castigo cuando –en reprimenda a alguna travesura– utilizan la frase “cháke policía”.

“Nosotros somos una era nueva, una era diferente, en donde el policía es un servidor”, resaltó el comisario al tiempo de destacar que el Grupo Lince es requerido también para festejos de cumpleaños para alegrar la vida de los niños. “Nosotros estamos procurando mantener en alto ese prestigio”, insistió.

Desde su creación en el 2017 hasta la fecha, el Grupo Lince está integrado por 560 agentes especializados, distribuidos en Asunción y Central, además en 8 filiales departamentales. Es así que hay presencia de Lince en Cordillera, Paraguarí, Alto Paraná, Encarnación, Caaguazú y Coronel Oviedo, Presidente Hayes y en los próximos días también se instalarán en el departamento de Concepción.

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