La Dirección General de Vigilancia de la Salud, encabezada por el epidemiólogo investigador Dr. Guillermo Sequera, emitió un reporte, en el que identificó que en el período comprendido entre el inicio de la fase 2 de la cuarentena inteligente y su final hubo menos casos positivos al COVID-19, pero aumentaron los casos de contagio comunitario.
Afirma que en la fase 2 se reportó menos casos positivos en relación a la etapa anterior; sin embargo, se observa que los infectados en la comunidad aumentaron. Menos de la mitad de los positivos son de la comunidad y hacen referencia a casos sin nexo epidemiológico y a contactos de los sin nexo.
“Cerca de la mitad de los casos registrados en la fase 2 es de la comunidad, mientras que antes era de 5 a 6%, y el resto de albergues”, de acuerdo a lo declarado por Sequera.
Datos de la cuarentena inteligente revelan que en la fase 1 se detectaron 516 casos, el 93% de ellos procedentes de albergues; mientras que en la fase 2 el número de casos positivos ascendió a 352, el 46% localizados en albergues.
También se verificó un aumento en la capacidad diagnóstica. La colaboración de las brigadas para las tomas de muestra y la inclusión de laboratorios cooperantes a partir de la semana epidemiológica SE 15 (primera semana de abril) influyeron en el incremento de las pruebas diagnósticas.
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El 65% de las tomas de muestra para COVID-19 son procesadas por el Laboratorio Central de Salud Pública, el 25% por el Senacsa, el 4% está a cargo del Centro de Especialidades Dermatológicas, 3% lo procesa el Instituto de Investigación en Ciencias de la Salud (IICS) y un 2% lo realiza el sector privado y otros.
También se lleva a cabo el monitoreo del personal sanitario con exposición al COVID-19. A la fecha, se registraron 2.081 personales sanitarios expuestos, el 75% con resultado laboratorial. El 3,21% (63) dio positivo al virus: 63% es del sexo femenino y 37%, masculino. El mayor porcentaje de afectados, 41%, se concentra en la franja de 29 a 39 años de edad, 25% tiene entre 40 a 50 años, 25% también refiere la franja de 51 a 61 años, 5% abarca los que tienen más de 62 años y 3% los que se hallan en el grupo de 18 a 28 años de edad.
El 70% de los afectados son médicos y personal de enfermería, le siguen los bioquímicos y personal de salud que concentra el 6 y 5%, respectivamente.
En relación a la categoría de contagio, el 75% de los profesionales de la salud adquirió el virus dentro del entorno asistencial: 51% con personal de salud, 36% a través del paciente y 13% en albergue. Igualmente se observó contagio del virus por contacto con viajeros en un 6%, 5% por contacto con caso y 14% sin nexo.
El 41% del personal de salud que enfermó por COVID-19 procede de Central, 33% es de capital, 11% de Alto Paraná y el 15% restante fue localizado en los departamentos de Itapúa, Amambay y Paraguarí. Del total de confirmados a nivel país, el 5% es personal sanitario.