Pobladores del Bañado Sur y Norte, además de representantes de distintas ciudades, reclaman atención y víveres frente a la sede de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) para la reactivación de ollas populares que alimentan a alrededor de 2.000 personas en distintos asentamientos y más de 300 vecinos de los Bañados de Asunción.
La manifestación se realizó frente al local de la SEN ubicado sobre Fulgencio R. Moreno, en Asunción, con la idea de exigir respuestas ante la falta de acción.
Muchos asentamientos o zonas vulnerables donde anteriormente se realizaban ollas populares, ya no pueden continuar alimentando a adultos, jóvenes y niños a falta de insumos. Los representantes y coordinadores llegan desde diferentes ciudades como Limpio, San Antonio, Areguá, Ñemby, Luque, Ypané y Villa Elisa.
“Somos coordinadores de ollas populares, también nos acompaña la gente del Bañado con las ollas solidarias. Nos manejábamos con ‘vaquita’, no hay más donaciones de la gente. Recurrimos a la SEN porque son los encargados de proveer víveres, ya es la quinta vez que venimos y es promesa tras promesa”, expresó Elizabeth Argüello en contacto con el canal GEN.
Los coordinadores de ollas populares piden la realización de mesas de trabajo y la provisión de carne, verduras, fideos y todo tipo de productos útiles para elaborar alimentos. Los manifestantes llevaron pancartas y también elevaron cánticos de repudio contra el Gobierno y el ministro del ente, Joaquín Roa. .
“Pedimos una mesa de trabajo con todos los coordinadores de ollas populares. Pedimos que los víveres sean nutritivos para que nuestra comida alimente de verdad. Necesitamos carne, verduras, fideos o arroz. Alimentos que nutran a nuestros niños, porque son ellos los más perjudicados. Ellos nos dicen ‘tengo hambre’. Si no tenés comida, ¿qué decís? Que la SEN no tiene víveres”, afirmó la mujer.
Señalan que la institución hizo una pequeña entrega de productos que resultó insuficiente, ya que se terminó a los pocos días. Aseguran que las autoridades no tienen conocimiento sobre las principales necesidades y la cantidad de tiempo de duración. “Queremos que nuestra olla popular sea consistente y nutritiva. Además, que no se termine en una semana”, dijo.