Ante la suspensión de las clases tanto de escuelas, colegios y universidades para evitar la propagación del coronavirus, en la Facultad de Filosofía de la Universidad Nacional de Asunción (UNA) analizan las opciones para no perder el año.

Gustavo Ibarra, de comunicación institucional de la Facultad de Filosofía, anunció que del 15 junio al 3 de julio se realizarán los exámenes virtuales para que los alumnos regularicen todas las materias pendientes para luego realizar clases virtuales. “Se realizará un tercer llamado para la regularización de materias pendientes del 2019. Luego se dará inicio a las clase virtuales”, apuntó en contacto con La Nación.

Afirmó que cada estudiante tendrá un día para desarrollar el examen, esto porque muchos están en el interior y es más difícil el acceso a internet. “Redirán de 6:00 a 23:00. Solo deben ingresar a la plataforma y podrán descargar el examen para luego completar”, puntualizó.

Resaltó que también plantean la posibilidad de desarrollar clases semipresenciales, con cierta cantidad de alumnos. Agregó que de igual manera todo depende del Ministerio de Salud y que la institución está preparada para desarrollar clases totalmente a distancia. “Se pueden realizar clases semipresenciales, pero todo depende la decisión del Cones. Las clases totalmente presenciales este año ya no vuelven”, aseguró.

Manifestó que los exámenes serán como una prueba de adaptación, para luego desarrollar las clases virtuales tanto para alumnos y docentes. Refirió que también se puede realizar la defensa de tesis en formato virtual y que aún no hay inscriptos. “Esto incluye a estudiantes de grado y posgrado; pasarán a la historia porque serán los primeros en defender en forma virtual”, aseguró.

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Desde la Coordinadora Estudiantil Universitaria de la UNA solicitan al presidente de la República, Mario Abdo, la eliminación total de los aranceles y la entrega de tablets a todos los estudiantes. A través de una nota expusieron la situación sanitaria que se vive por el COVID-19 y las consecuencias que tiene en el sector universitario.

Un Plan de Contingencia para la Educación Superior es la bandera que levantan en este momento, lo que es calificado como “inédito”. El pedido es realizado por estudiantes de distintas facultades y desde los distintos centros de estudiantes, representaciones estudiantiles y movimientos.

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