La Policía Nacional y la Fiscalía realizaron tres allanamientos, en Caacupé, Emboscada y San Lorenzo, con la hipótesis de que la niña Juliette fue secuestrada. El Ministerio Público anunció que se reconstruirán las últimas 24 horas en que la pequeña desapareció hasta la fecha. Para los investigadores, la menor continúa con vida, ya que no existen indicios que demuestren lo contrario.

El fiscal Lorenzo Lezcano reconoció que existe “cierta amistad” entre el dueño de la casa allanada en la compañía Cabañas de Caacupé, Joaquín Pash, ciudadano alemán, con Reiner Oberuber, padrastro de Juliette. Ambos serían socios comerciales e incluso aseguran que la niña concurrió a este sitio ubicado en un condominio donde residen ciudadanos alemanes.

“El dueño del domicilio allanado y el padrastro mantenían cierta amistad. Tenemos evidencia de que este domicilio era frecuentado por la familia y la propia Juliette. El día de la desaparición y días posteriores hubo fluida comunicación entre esta persona y el señor Reiner. También hay vínculos comerciales entre ellos", expresó el fiscal Lorenzo Lezcano.

En la casa del ciudadano alemán en Caacupé se incautaron teléfonos celulares y cámaras de circuito cerrado que serán analizados, con la posibilidad que lleve a ubicar a la niña con paradero desconocido desde hace 34 días. Reiner, la pareja de la mamá de Juliette, fue visto varias veces en la residencia, según versiones de los pobladores.

“Él efectivamente reconoce que mantenía cierta amistad con Reiner. Son hipótesis que venimos manejando, por eso incautamos el circuito cerrado. Tenemos evidencia que concurría la pequeña en este lugar. Tenemos evidencias de que la familia visitaba la vivienda, inclusive Juliette", manifestó Lezcano.

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Igualmente, en Emboscada allanaron la casa de una niñera, quien estuvo cuidando de ella el año pasado mientras concurría a la escuela. Manifestó que no tuvo más contacto con la pequeña este año.

En tanto que en San Lorenzo allanaron la casa de Brigitte Fuzellier, que manifestó que desconoce el motivo por el que allanan su domicilio y cuestionó el procedimiento policial fiscal en su contra.

“Yo me enteré del caso de Yuyú recién 4 días después. Por querer ayudar a un ciudadano alemán me echan de la cama. Veo una cacería de brujas contra los ciudadanos alemanes. Siento mucho que en otros casos no se investigan de esta forma. Tratan de encontrar algún culpable”, expresó Fuzellier.

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Hasta el momento no se tienen mayores novedades sobre el paradero de la niña. Los investigadores tienen hipótesis y el caso sigue siendo considerado como desaparición de persona.

“Tenemos que tener ciertas reservas. Nosotros consideramos que puede estar aún viva. Es una de las hipótesis que tenemos. Todo eso estamos analizando. No tenemos vestigios de que ella esté muerta tampoco. Manejamos esas dos hipótesis”, expresó el comisario César Silguero.

La madre y el padrastro de la pequeña Juliette fueron detenidos, Reiner Oberuber y Lilian María Zapata, aprehendidos e imputados por violación del deber de cuidado y abandono. Ambos se encuentran con prisión preventiva.