Debido a la poca frecuencia de buses de empresas de colectivos, se busca implementar la habilitación de minibuses, minivan o furgonetas para la prestación de un servicio de transporte público de pasajeros. La iniciativa ya cuenta con media sanción por parte de la Cámara de Senadores a raíz de la regulada y la disminución de ómnibus en circulación.

La empresa Magno, que explota la línea 12, manifiesta que la informalidad planteada en esta premisa fomentará una competencia desleal dentro del rubro y no garantiza las medidas de seguridad sobre el transporte público, ya que no contarían con itinerario ni frecuencia.

Para Alejandro Zucolillo, directivo de Magno, los transportes alternativos no garantizan el cumplimiento de los protocolos de cuidado de pasajeros, desinfección, uso de tapabocas o cobro justo del pasaje y que estén 100% capacitados para trasladar personas.

“La propuesta que tenemos es acompañar una nacionalización temporal o permanente del transporte público. Durante esta pandemia podemos poner a disposición los buses, es decir ceder la flota, para que el Viceministerio de Transporte pague el salario de los conductores y el combustible”, expresó Alejandro Zucolillo en contacto con el canal GEN.

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Insistió que este proyecto de transporte alternativo apuesta a la informalidad y hace imposible el cumplimiento de las normas para las empresas regulares. “Nosotros vamos a perder todo el costo financiero sin ningún ingreso. Es solamente para paliar una situación excepcional que entendemos no es culpa de nadie”, afirmó el empresario.

Para el empresario, si el gobierno ofrece alrededor de 200 millones de dólares podría tomar el monopolio del transporte público del área metropolitana y la gestión sería totalmente desde el Estado. Señaló que están dispuestos a vender y entregar las empresas con todos los activos, es decir, los buses, talleres, terminales y paradas.

“También podemos proponer la nacionalización permanente del sistema de transporte público. Con una inversión de 100 millones de dólares y asumiendo otros 100 millones de dólares invertidos en terminales y paradas, estimamos 200 millones lo que requiere el gobierno para nacionalizar todo el sistema del área metropolitana. Para ser dueño como la ANDE o ESSAP. Así tendrá el monopolio del sistema de transporte público”, afirmó Zucolillo.

Por otro lado pidió adelantar el uso del billetaje electrónico para reducir riesgo de contagio al chofer el conductor de transporte público al entrar en contacto con papel o monedas de parte de usuarios que puedan contar con el virus. “Vamos a poner en peligro todo este proyecto de sanidad si es que se empiezan a infectar conductores de transporte público. Queremos que no suban con efectivo a los buses”, afirmó.

Por último, señala que cumplieron desde un inicio en totalidad con todas las disposiciones del Gobierno y medidas de precaución. Indican que existen muchos conductores que están sin trabajar por lo decretado, ya que no pueden operar al 100% de la flota. Además, afirman que han subsidiado a cada uno de ellos porque están inscriptos en el IPS.