La Administración Nacional de Electricidad (Ande), se mantiene en una posición muy dura con los industriales porque no realiza ninguna reducción del costo de los servicios, a pesar de que las empresas estuvieron inactivas por casi 60 días a raíz de la crisis sanitaria, afirmó Luis Tavella, directivo de la Unión Industrial Paraguaya (UIP).

“Realmente la Ande no flexibiliza y se mantiene firme. Los únicos que tuvieron alguna ventaja son los que consumen por debajo de G. 220.000, que no es nada. La más perjudicada es la clase media, que es la que mueve la economía y la que más consume”, expresó Tavella a radio Ñandutí.

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Según indicó, si todo va bien se va a poder arrancar en el mes de agosto y por el momento las empresas están buscando la manera de perder lo menos posible. En contrapartida, se tiene un sector público que no siente ningún efecto porque van a cobrar igual sus salarios.

“Entonces, creo que estamos pasando mal este tema de la economía, la forma como la estamos pasando ahora. Dentro del sector público existe una comodidad y dentro de la comodidad está la Ande”, señaló.

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En ese sentido, agregó que hay grandes empresas que están pagando sumas muy importantes por potencias reservadas, pero que la proveedora estatal no da ningún beneficio. Por lo tanto, se tiene un panorama bastante negro, pero si se hacen bien los deberes, a partir del segundo semestre se va a tener una reactivación. “Esa es la esperanza que todos tenemos”, manifestó.