En Italia están probando el anticoagulante como tratamiento contra el coronavirus y el mismo está teniendo buenos resultados.

Este lunes, el Dr. Marco Stabile, médico cirujano italiano, impulsor del experimento que trabaja con pruebas de heparina contra el COVID-19, conversó con Universo 970 AM y mencionó que el tratamiento fue probado en unos 350 pacientes y que éste está dando buenos resultados.

“El tratamiento es clásico, usamos la hidroxicloroquina, el anitviral, pero en la segunda fase debemos utilizar la heparina porque es un fármaco que previene todas las complicaciones mortales del COVID-19”, empezó contando.

El médico explicó que la heparina es un anticoagulante clásico que es utilizado normalmente en la práctica clínica. “Estamos ahora en un nuevo estudio prospéctico en nuestro hospital. De estos 350 pacientes en terapia, nuestra conclusión es que podemos evitar la intubación en muchos casos porque el paciente tiene un mejoramiento de la circulación, no tiene la microtrombosis la clásica de la segunda fase. Este estudio está hecho en 350 casos en total”, sostuvo.

Agregó que la mayor complicación es la microtrombosis de embolia pulmonar que tienen los pacientes más graves. Así también manifestó que el pulmón no es el único órgano que afecta. “El virus ataca la pared basal del bazo que tiene una trombosis. Por protocolo, en toda Italia yo pienso que usan heparina como medicamento importante para prevenir la trombosis. Por lo que se debe utilizar la clase anticoagulante clásica 100 unidad internacional por kilo, dos veces al día”, añadió.

El mismo enfatizó que el tratamiento con heparina debe ser únicamente hospitalario.

Stabile indicó que la vacuna debe tardar ahora 6 meses a 1 año. Pero en cuanto a la terapia, es importante hacer la atención precoz del paciente. Al respecto, recomendó la atención precoz del paciente ya que si presenta fiebre, tos, dolor articular, muscular es el momento para iniciar la terapia viral para evitar la complicación y el efecto de la inflamación.

Así también, destacó que la primera regla es que el virus COVID no tiene piernas, entonces si te quedas en tu casa, no se puede transmitir.

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