En el contexto de epidemia actual, los malos hábitos de higiene y la poca infraestructura sanitaria local para afrontarlo, aplicar la práctica del teletrabajo convendría como medida para proteger la salud de los trabajadores. Sin embargo, significa además el momento oportuno para derribar la creencia de que a mayor cantidad de horas-nalga se consigue mayor productividad.
Por: Jazmín Gómez Fleitas
jazmin.gomez@gruponacion.com.py
El trabajo de manera remota ya se viene implementado en entornos de trabajo desde hace años atrás, sobre todo en Estados Unidos y Europa, como una práctica que empezó con el home office -el trabajo desde la casa- que ofrecía la oportunidad de trabajar un día o más de la semana desde el hogar. Años después, ese concepto evolucionó al teletrabajo -o trabajo de manera remota- para desempeñar las responsabilidades desde cualquier lugar que tenga conexión wifi, teniendo consigo la computadora (espacio de coworking, cafetería, etc.).
En esta era post moderna, la productividad es muy valorada. ¿Sabemos su significado correcto? “Los consejos de productividad tienden a ser escritos desde la perspectiva de lograr más tareas laborales, pero ese no es exactamente su objetivo. El objetivo de la productividad como consejo es conseguir más tiempo libre gracias a eliminar el tiempo dedicado a actividades derrochadoras”, así lo explica la joven emprendedora tecnológica Megan Holstein, escritora estadounidense del libro de diseño de apps para emprendedores y especialista en productividad.
“No aprovechar los recursos que nos brindan las nuevas tecnologías es un desperdicio”
“Esta epidemia o pandemia trae la brillante oportunidad de pensar también en cómo podemos innovar en nuestros trabajos, sobre todo cómo nos organizamos y cómo generamos lo que tenemos que producir en contextos virtuales”, inicia explicando la Psicóloga Laboral Mercedes Argaña.
Y continúa: “En toda Europa hace años se viene trabajando en esta cultura digital que permite que los trabajadores, y las empresas también, optimicen sus procesos productivos aprovechando lo que la tecnología permite. Mi tesis de Máster fue sobre necesidades de entrenamiento de equipos virtuales. Los equipos virtuales son equipos que trabajan coordinadamente y mediados con la tecnología aunque estén remotamente distantes geográficamente. El trabajo se está virtualizando y no aprovechar los recursos que nos brindan las nuevas tecnologías es un desperdicio. Se ahorra muchísimo en costos ambientales (no usas combustible, no contaminas), se ahorra tiempo de traslado (no perdés tiempo en el transporte) y se aumenta la productividad porque te libera el tiempo que estás ahorrando para hacer más cosas en tu vida, además de lograr los objetivos laborales. Múltiples ganancias trae la virtualidad del trabajo, para el trabajador y las empresas”, coincide Mercedes Argaña con la gurú joven de emprendedores.
¿Nos estamos adecuando como país a las nuevas formas de trabajo? “El gran desafío que tenemos es desarrollar las competencias digitales para que los trabajadores y trabajadoras puedan desempeñarse con alta eficiencia en este nuevo entorno. Y también superar a brecha digital que pudiera haber en una empresa, entre sus funcionarios (ya que hoy conviven cuatro generaciones: baby boomers, generación x, millennials y centennials) o el nivel de desarrollo tecnológico que tengan (computadoras con la agilidad necesaria). O si tuviera oficinas distribuidas en todo el país, también debería ver que la cobertura tecnológica sea adecuada y compatible”, expone Argaña.
Aplicaciones para trabajar de manera remota
¿No deberían ser las multinacionales, telefonías o medios de comunicación los que sientan el ejemplo e impulsen la innovación? ¿No es un buen momento para que las reuniones que no debían ser reuniones puedan ser mails o videoconferencias? Las múltiples oportunidades que nos ofrece la tecnología para desempeñar funciones laborales a distancia pueden comprobarse con estas aplicaciones -en su mayoría gratuitas o con límite de espacio de uso gratuito- para celulares, así como la mayoría de ellas cuenta con sus versiones accesibles desde la web:
- Zoom. Vídeo conferencias, pantallas compartidas, webinars.
- Skype. Reuniones virtuales de una o más personas.
- Medium. Compartir entradas, publicaciones.
- Okta. Administración de acceso, plataforma pata publicar contenido.
- One Drive. Acceso a documentos, fotos, archivos desde cualquier dispositivo.
- Google Drive. Almacenamiento de archivos, que permite compartirlos o editarlos en línea.
- Google Calendar. El calendario con recordatorios de eventos, tu agenda o planificador diario.
- WeTransfer. Transferencia de archivos de más de 2GB
- Dropbox. Es el primer espacio de trabajo virtual, donde almacenar archivos, fotos, etc., y acceder a ellos en el entorno de trabajo.
- Slack. Mensajería para equipos.
- Trello. Tarjetas, listas y tableros para organizar el trabajo de equipo, tareas o prioridades laborales.