La víctima del asesinato sin motivo aparente se llamaba Lorenzo Silva Arce, el joven era oriundo de Tacuatî, departamento de San Pedro. El hombre acababa de cumplir 29 años, se dedicaba al reciclado por unos billetes que apenas alcanzaba para llegar al sustento diario. En plena madrugada, llegó caminando a un banco, se detuvo a descansar hasta que un automóvil estacionó a su lado y cuyo conductor disparó dos veces sin mediar palabra.

El joven fue asesinado por el chofer que le disparó desde su vehículo para luego continuar su marcha y darse a la fuga como si nada hubiera pasado. Los intervinientes sospechan que se trata de un crimen de odio en contra del joven que presenta rasgos indígenas. Este tipo de hechos son denominados cuando el atacante actúa por la pertenencia de la víctima a cierto grupo social, sexo, ideología, religión, raza, etnia o nivel socioeconómico.

“De confirmarse la hipótesis de crimen de odio, estaríamos ante una situación muy grave. Ojalá que esté equivocado porque eso cambia totalmente la historia. El hombre no tiene ningún tipo de antecedentes. Hasta ahora no tenemos mayores datos sobre los sospechosos”, expresó Abel Cantero, subjefe del Departamento de Homicidios, en contacto con 970 AM.

Por su parte, la fiscal Daniela Benítez señaló que el conductor pasó en dos oportunidades antes de detener la marcha una tercera vez para disparar y matar a Silva Arce. “Se observa una secuencia de que el automóvil donde se realizó el disparo pasó dos veces antes de perpetrar el homicidio”, afirmó.

Aparentemente se trata de un automóvil Toyota Corolla de color plata, en búsqueda del conductor, por lo que se realiza la verificación de circuito cerrado. El hecho ocurrió sobre la calle Jejuí casi Montevideo, en las inmediaciones del Mercado N° 3, del mircrocentro de la capital. La víctima murió a causa de un impacto de bala en la espalda. Igualmente se dio intervención también a la Dirección de Derechos Étnicos del Ministerio Público.