Esta tarde, la fiscal Claudia Aguilera imputó a Andrés Armoa, de 35 años, por el presunto feminicidio de su cónyuge María Cirila Contrera, de 37 años. Además fue procesado por producción de riesgos comunes, en presunta violación a la Ley de Armas. También solicitó que el acusado guarde prisión preventiva. El hecho ocurrió en una vivienda ubicada en Ñemby, ayer en horas de la tarde.

Armoa llevó a su pareja hasta Urgencias del Hospital de Calle'í, en San Lorenzo, luego de disparar su pareja, a la altura del pecho. La víctima habría ingresado al centro de asistencia médica ya sin signos de vida. La forense María Elizabeth Totti diagnosticó la causa de muerte como “shock hipovolémico por herida de proyectil de arma de fuego”. Posteriormente, el cuerpo fue llevado a la Morgue Judicial donde se realizó la extracción del proyectil.

Hoy se realizó un allanamiento en la vivienda donde ocurrió el hecho en la ciudad de Ñemby, donde se halló un arma de fuego, tipo revólver (marca Doberman), calibre 22 mm, con nueve cartuchos en el alveolo y una vaina servida.

Además, los intervinientes incautaron dos escopetas; una de calibre 12 mm de la marca Centaura (decogotado) y otra de calibre 12 mm, de presunta fabricación casera (marca Tuper) con 19 cartuchos sin percutir y siete cartuchos de calibre 16 mm.

Al llegar al nosocomio, Armoa señaló que habían sido víctimas de un intento de asalto, pero al ser evidente la herida producida por un arma de fuego, el personal de blanco dio aviso a la Policía Nacional.

Al ser interrogado por los agentes de Investigaciones, Armoa cambió su versión y dijo que él habría sido el autor del disparo, pero que fue en forma accidental. Supuestamente quiso realizar un disparo al aire, pero la bala dio contra el techo del tinglado e impactó contra la mujer, según señaló.