El certificado de reposo médico a pacientes debe expedirse sin necesidad de resultados de laboratorio y teniendo en cuenta los síntomas del mismo. Y no solo en casos de influenza, según advierte el Ministerio de Salud.
Si amaneciste con tos, dolor de garganta, fiebre, congestión nasal o algún otro síntoma de enfermedad, es mejor que postergues tu ida al trabajo o a la institución educativa, y acudas lo antes posible a la consulta médica, porque puede que tengas alguna afección respiratoria.
Cabe resaltar que acudir a tiempo al hospital si cuenta con estos síntomas y por ende recibe el tratamiento oportuno, pueden evitar que el cuadro se agrave y se complique. En el peor de los escenarios, desencadenar en la muerte.
Según la evaluación clínica y el criterio médico, se otorga al paciente un certificado de reposo médico.
El reposo se establece como medida de tratamiento y pronta recuperación del paciente. Además, se utiliza como estrategia para impedir la propagación masiva del virus respiratorio a otras personas.
“Para la expedición del certificado de reposo, no se requiere adjuntar ningún resultado de laboratorio”, precisa el Dr. Hernán Rodríguez, médico infectólogo, actualmente a cargo de la Dirección de Vigilancia de Enfermedades Transmisibles del Ministerio de Salud Pública.
El profesional advierte que el resultado de laboratorio puede arrojar un falso negativo, pero eso no descarta la posibilidad de que el paciente cuente con el virus respiratorio en sospecha.
Rodríguez aclara que no solo los pacientes con influenza requieren reposo domiciliario y aislamiento, sino también aquellos que refieran otros tipos virus, como el virus sincitial respiratorio.
Durante el reposo el enfermo debe:
1. Respetar el reposo domiciliario y seguir al pie de la letra las indicaciones del médico: tomar solo los medicamentos prescriptos y acudir a los controles establecidos.
2. Cubrirse la boca y la nariz al momento de toser. Estornudar con la flexura del brazo o con un pañuelo, nunca con la mano, esto evitará transmitir el virus a otros contactos.
3. En caso de emplear pañuelo desechable, se aconseja luego de utilizarlo, desecharlo inmediatamente al bote de basura y seguidamente higienizar las manos.
4. Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, es la primera medida de prevención. Esta práctica debe realizarse, sobre todo, luego de entrar en contacto con secreciones (moco o saliva), después de limpiarse la nariz.
5. No compartir tereré, mate ni cubiertos.
6. Al saludar, evitar pasar la mano o dar besos.
7. Durante el reposo, evitar acudir a lugares donde hay aglomeración de personas (shopping, cine, supermercado, estadio), a fin de impedir la expansión de la enfermedad.