El suboficial ayudante Benito Joel Sanabria recibió una condena de 12 años de cárcel por haber disparado en el rostro con balines de goma al diputado, Edgar Acosta, el pasado 31 de marzo de 2017, en inmediaciones del Congreso Nacional. El uniformado fue imputado y sentenciado por lesión corporal. Ocurrió el 31 de marzo del año 2017, sobre las calles 14 de Mayo y el Paraguayo Independiente de Asunción.
"Lo único que puedo decir es que siento mucho la condena para esta persona. Yo no me quiero imaginar son los doce años de condena para este señor, sinceramente siento mucho. Lo que puedo decir es que ese día los policías estaban muy nerviosos", expresó Acosta en contacto con la 800 AM.
El Tribunal de Sentencia estuvo compuesto por los magistrados: Arnaldo Fleitas, Olga Ruiz y Elsa García.
El diputado Acosta lamentó que sólo el suoficial se encuentre imputado mientras policías de mayor rango ni siquiera fueron imputados por el hecho que derivó en la muerte del joven dirigente liberal, Rodrigo Quintana.
"No guardo rencor"
"Hizo el mal el oficial en actuar así, pero ninguno de los que dieron la orden está procesado. Yo le siento mucho a él. Los sentimientos uno tiene que aceptarlo. Yo no guardo rencor, ni nada que se le parezca. Los que dieron la orden ni siquiera están procesados", afirmó el diputado Acosta.
El abogado Alfredo Sosa, quien se desempeña como defensor legal del policía indicó que la condena es “excesivamente elevada” y adelantó que apelará. Refirió que esperarán la lectura de la sentencia que se realizará el próximo 6 para poder apelar.
"Me afecta un joven que tenga que estar privado tanto tiempo., tengo muy buena relación con policías. No está en mis manos, pero si pudiera ayudar lo haría", explicó Acosta.
La investigación inicial estuvo a cargo de la fiscal, Liliana Zayas, que consideró que la conducta del acusado era punible, teniendo en cuenta las consecuencias y la gravedad del hecho. La agente refirió que el suboficial tiene antecedentes por coacción sexual.
La fiscal Cabrera refirió en su alegato: “El acusado, en pleno uso de sus facultades mentales y en el ejercicio de su libre albedrio y como miembro de la Policía Nacional, decidió llevar a cabo una conducta deplorable en el ejercicio de sus funciones y causar una lesión grave a una persona, que tendrá secuelas de por vida”.
En la noche del 31 de marzo del 2017, un grupo de policías irrumpió en el local partidario de los liberales en la capital. A raíz de un disparo, falleció Rodrigo Quintana en el lugar, por lo que actualmente se encuentran imputados el presunto autor del disparo, Gustavo Florentín.
Las manifestaciones se realizaban en contra de la búsqueda de reelección del presidente Horacio Cartes.