De acuerdo al intendente de Luque, Carlos Echeverría, se entregarán más de Gs. 2.000 millones de inversión para varias instituciones educativas de Luque, en cuanto a provisión de almuerzo a través del Consejo del FONACIDE. La entrega inicial se realizó en la Escuela Ángel de la Guarda.
La empresa adjudicada es Arte Culinario de Aida Aquino de Farías que tendrá que preparar 130.670 raciones para un total de 1.790 alumnos. El proyecto se extenderá hasta fin de año.
Algunas de las instituciones que serán beneficiadas son la Escuela Ángel de la Guarda, Escuela Nueva Asunción, Escuela Don Fabián Cáceres, Escuela Eugenio A. Garay, Escuela Héroes Luqueños, entre otras.
La institución también está siendo beneficiada con la construcción de un aula con techo de losa. Además de esto, se construirán 2.317 m2 de empedrado para la escuela en el marco de las obras viales del FONACIDE.
"Más de Gs. 2.000 millones de inversión para diversas instituciones educativas. En todos los procesos educativos lo más importante es el alimento. Tenemos niños que no desayunan ni almuerzan por lo que vienen para poder alimentarse y de alguna manera tener una mayor concentración", expresó Carlos Echeverría intendente de Luque.
Dejanos tu comentario
Al estilo Prieto, clan Estigarribia amañó licitaciones para facturar
Documentos revelan burdo esquema de contrataciones de obras, almuerzo escolar, hasta compra de combustibles en la Municipalidad de Villa Elisa. Como hizo Miguel Prieto en Ciudad del Este con las compras covid de alimentos, los hermanos Ricardo Estigarribia Medina y Sergio Estigarribia Medina blanqueaban adjudicaciones con invitaciones realizadas a empresas del grupo familiar. Es así como aparecen casos alevosos en los que están como únicos oferentes proveedoras de los cuñados y la ya famosa bella joven “constructora”, pareja del ordenanza del actual intendente.
- Por Rossana Escobar M.
- rossana.escobar@nacionmedia.com
Mientras el caso de amaño de dos licitaciones por urgencia para compras covid de alimentos en la Municipalidad de Ciudad del Este durante la pandemia puso al intendente Miguel Prieto en el centro del escándalo de corrupción por los que afronta hoy dos imputaciones en las que se le atribuye lesión de confianza, asociación criminal, etc., el clan Estigarribia de los hermanos Sergio Estigarribia Medina (intendente) y Ricardo Estigarribia Medina (gobernador de Central), desapercibidos a los órganos de control, tenían el mismo modus operandi desde antes, durante y después de la emergencia sanitaria. Es así como privilegiadas por contrataciones directas y por vía de la excepción entre 4 empresas del clan Estigarribia amasaron G. 14.464 millones provenientes del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide) y de los royalties.
No es la casualidad, menos la competitividad requerida en una licitación seria y transparente la que hizo ganar millonarios contratos directos y por excepción a empresas del clan Estigarribia en la Municipalidad de Villa Elisa. Desde el vamos, los procesos de contrataciones de obras, almuerzo escolar, combustibles, etc., fueron cocinados burlando las instituciones de control como la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP), la Contraloría General de la República mediante una estructura conformada por funcionarios leales que facilitaban los trámites, operadores políticos, familiares de subordinados que fungen de exitosos empresarios.
Como hizo Miguel Prieto en Ciudad del Este con el sonado caso Tía Chela, un pequeño autoservice de la ciudad al que adjudicó un contrato por excepción por una compra de casi G. 3.000 millones sin que el propietario cuente con la capacidad financiera, parodiando un proceso de adjudicación con miembros de una familia, en Villa Elisa, los hermanos Estigarribia hicieron lo mismo.
El sonado caso del humilde constructor de pozo artesiano don Buenaventura Morínigo, a quien Miguel Prieto adjudicó G. 306 millones por provisión de miles de kilos de insumos alimenticios, proceso en el que “compitieron” entre parientes, es un esquema calcado en Villa Elisa.
EL MODUS OPERANDI
En sus tiempos de intendente, el ahora gobernador de Central Ricardo Estigarribia y su sucesor en la Municipalidad de Villa Elisa, su hermano Sergio Estigarribia Medina, adjudicaron millonarios contratos de obras a Cospel SA, en la que figura como accionista una joven de modesto origen de nombre Natalia Magalí Duarte Yeruta, pareja del ordenanza del actual jefe comunal, Ángel Gustavo Talavera. En la misma empresa aparecen como accionistas Eduardo Manuel Mendoza Amarilla, cuñado de Sergio Estigarribia y Francisco Javier Amarilla Monzón, hermano de Rodolfo René Amarilla Monzón, y Fermín Alberto Amarilla Monzón, funcionarios contratados de la Municipalidad de Villa Elisa.
No es un dato menor que Derlis Hugo Vázquez Ávalos, esposo de la responsable de la UOC Laura Noemí Delvalle, es el síndico de Cospel, según las actas de asamblea de la sociedad.
Otorgaron contratos de almuerzo escolar a la firma Asispar SA, proveedora en la que aparece Ricardo Fernández Campuzano, pareja de Gladys Zunilda “Nuni” Medina Galeano, hermana criada por la familia Estigarribia, y registra 44 % de las acciones, según documentos proveídos por la Abogacía del Tesoro del Ministerio de Economía.
Otra accionista de Asispar SA es Rosa Nathalia Zena con el 46 %. La mujer es pareja de Víctor Manuel Núñez Samaniego, un funcionario del Ministerio de Educación que figura como síndico en actas de asamblea de la citada proveedora y quien también es socio de la familia del intendente y el gobernador en otra empresa en la que registran millonarios aportes en efectivo, aunque estas inversiones no figuran en su declaración jurada de bienes presentada ante la Contraloría General de la República (CGR).
Otra beneficiaria es la contratista V&V Construcciones SA, empresa en la que se turnan como representantes legales, firmantes de los contratos Heriberto Trevizon, un hurrero del clan Estigarribia que, de cobrar subsidio en la Municipalidad de Villa Elisa, se transformó en cotizado proveedor; así también familiares de empleados de la comuna, entre ellos, Derlis Hugo Vázquez Ávalos, marido de la responsable de la UOC, Laura Noemí Delvalle López.
Investigaciones de nuestro medio encontraron entre los documentos de rendiciones de cuentas como expedientes de la DNCP cartas de invitación para estas contrataciones extendidas a empresas de la familia. Es así como uno de los amaños más alevosos es el proceso licitatorio en el que el año pasado Sergio Estigarribia adjudicó compra de combustible a Asispar SA, empresa a la que había adjudicado contrato por almuerzo escolar Ricardo Estigarribia y firma en la que aparece como accionista el gran cuñado de ambos Ricardo Fernández Campuzano.
Los únicos oferentes en el proceso licitatorio fueron Asispar SA, del gran cuñado Ricardo Fernández Campuzano, y Cospel SA, del otro cuñado de Sergio Estigarribia y en la que aparece novia de su ordenanza.
Otra empresa invitada en las licitaciones es Las Azas SA que, según documentos contractuales, fue convocada para completar cantidad de potenciales oferentes en procesos que favorecieron a V&V en 2019.
Las Azas SA es una sociedad que, según escrituras públicas, fue comprada en abril de 2018 por Lissi Romina Medina Fretes, esposa de Ricardo Estigarribia, junto con Gladys Zunilda “Nuni” Medina Galeano, hermana de este y Sergio Estigarribia. Con este vínculo empresarial se confirma otro caso en que el clan Estigarribia armó adquisiciones en las que competían firmas del grupo familiar.
Cabe recordar que Las Azas SA es una de las empresas que ya había saltado en una denuncia que había puesto a disposición de la (CGR) el Instituto de Derecho y Economía Ambiental (IDEA), como parte de los bienes que engloban un desmedido crecimiento patrimonial de Ricardo Estigarribia.
¿MAGAS DE LAS FINANZAS?
No es menos relevante que al momento de suscribir las acciones a su nombre ambas mujeres integraron de entrada y con dinero en efectivo G. 1.500.000.000, según la escritura pública número 22 del 26 de abril de 2018 de Las Azas SA. Esto sin contar las varias propiedades adquiridas con el ropaje de la sociedad.
El marido de Nuni, privilegiado proveedor de la municipalidad, según documentos de Fonacide y royalties, figura como síndico de las Azas SA hasta el 2022.
Las pocas referencias laborales en los registros comerciales de la mujer de Ricardo Estigarribia y el antecedente de la modesta hermana Nuni sugieren que las “inversionistas” de la sociedad Las Azas SA son unas destacadas “magas de las finanzas”.
Dejanos tu comentario
Calles reparadas por favorita del clan Estigarribia, con feroces baches
¿Dónde queda la empresa Cospel SA, en la que figura una bella señorita y el cuñado del actual intendente de Villa Elisa que se adjudicó una treintena de obras en la ciudad de la nada, en tiempo récord, gracias a los hermanos Sergio y Ricardo Estigarribia? Las direcciones que figuran en los documentos oficiales no llevan a ninguna constructora y la responsable de la Unidad Operativa de Contrataciones, es decir, la funcionaria encargada de tramitar las licitaciones no supo brindar información al respecto, pese a que gestionó una treintena de contratos por excepción y de manera directa a favor de la privilegiada sociedad del cuñado de su jefe. Más grave aún es el estado en el que se encuentran las calles que forman parte de las obras facturadas y que están minadas de pozos, roturas.
- Por Rossana Escobar M.
- rossana.escobar@nacionmedia.com
Con dinero de los contribuyentes de Villa Elisa, recursos provenientes del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide) y los royalties, los hermanos Sergio Estigarribia Medina (intendente) y Ricardo Estigarribia Medina (actual gobernador de Central) mejoraron las ganancias de su constructora mimada, no así el estado de las calles que mandaron reparar a la contratista y que están minadas de pozos, roturas, etc.
Cospel SA es la constructora que el clan Estigarribia estrenó como contratista en la Municipalidad de Villa Elisa en 2022, inmediatamente después de figurar como accionistas una modesta joven de Villa Elisa de nombre Natalia Magalí Duarte Yeruta y el cuñado del intendente Sergio Estigarribia, de nombre Eduardo Manuel Mendoza Amarilla.
Natalia Magalí Duarte Yeruta es pareja de Ángel Gustavo Talavera, también modesto funcionario de la Municipalidad de Villa Elisa que percibe G. 3,5 millones de sueldo como ordenanza del intendente. Mientras que Eduardo Manuel Mendoza Amarilla es hermano de la esposa del jefe comunal, María Esther Millán Amarilla. Es así que los beneficiarios de los contratos que fueron adjudicados de manera directa y por vía de la excepción son parte del clan Estigarribia.
Las rendiciones de cuentas del Fonacide y de los royalties proveídos por la Contraloría General de la República (CGR) y otros pocos publicados en el portal de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP) registran una treintena de adjudicaciones a la empresa de la bella señorita y el cuñado que suman G. 3.733 millones en menos de dos años.
Nuestro equipo de investigación hizo un recorrido por algunas de las calles cuyas reparaciones y mantenimientos fueron adjudicados a Cospel a través de los royalties y nos encontramos con la triste realidad de que se encuentran en estado desastroso, con predominio de profundos baches, mientras todavía se pueden observar en las murallas y los postes de la Ande afiches de la campaña de Sergio y Ricardo Estigarribia.
La calle Oceanía de Villa Elisa, cuya reparación y mantenimiento fue adjudicado en varias ocasiones en dos años, tiene mina de baches. Los vecinos dicen que las reparaciones de esta calle prácticamente son con fecha de vencimiento, los trabajos son reiterados, pero no hay solución.
La calle Luis Alberto del Paraná, para la cual se adjudicó a Cospel la reparación y sellado de hormigón a fines de octubre pasado, se encuentra en un estado lamentable, llena de baches. Un vecino nos comentó que el pozo que le afecta a la entrada de la vivienda “está así desde el año pasado”, no se arregla.
Así, varias otras calles cuyos arreglos fueron adjudicados a la empresa donde figura el cuñado y la joven de Villa Elisa, no registran mejoras.
¿DÓNDE ESTÁ COSPEL?
No existe ninguna empresa constructora en las direcciones que figuran en los documentos oficiales, como de declaraciones juradas de bienes y rentas, contratos de adjudicación, registros de la DNCP, etc.
Nuestro equipo hizo varios recorridos a lo largo de las calles que se mencionan en los documentos, consultamos con vecinos de esas zonas, pero nadie conoce a Cospel SA.
Fuimos hasta la Municipalidad de Villa Elisa para consultar sobre la dirección de la constructora y conversamos con la responsable de la Unidad Operativa de Contrataciones, Laura Noemí Delvalle, pero la funcionaria se ocupó más bien en pegar la vuelta por el mundo de las contrataciones públicas con explicaciones de cómo funciona el proceso, pero no supo confirmar la dirección de la constructora mimada. Al ser insistida, solo atinó a decir: “Y está en el contrato”.
MÁS MIEMBROS DEL CLAN ESTIGARRIBIA MAMAN DE FONACIDE Y ROYALTIES
Además de la joven pareja del ordenanza y el cuñado de Sergio Estigarribia, hay otro gran cuñado detrás de empresas adjudicadas con Fonacide y royalties en la Municipalidad de Villa Elisa, principalmente en los tiempos del hoy gobernador Ricardo Estigarribia.
Ricardo Fernández Campuzano, pareja de Gladys Zunilda “Nuni” Medina Galeano, hermana criada por la familia Estigarribia, según documentos de la Abogacía del Tesoro del Ministerio de Economía, registra 44 % de las acciones en la proveedora de almuerzo escolar Asispar SA, que se adjudicó contratos que suman cerca de G. 2.000 millones.
En Asispar SA también aparece Rosa Nathalia Zena con el 46 % de las acciones. La mujer es pareja de Víctor Manuel Núñez Samaniego, un funcionario del Ministerio de Hacienda que figura como síndico en actas de asamblea de la citada proveedora y es socio de la familia del intendente y el gobernador en otra empresa en la que registran millonarios aportes en efectivo.
Llamativamente en las declaraciones juradas del funcionario de Hacienda, presentadas ante la Contraloría, no figuran estos negocios con el clan Estigarribia.
El gran cuñado Ricardo Fernández Campuzano, multifacético, hizo otros negocios con la Municipalidad de Villa Elisa, gracias al clan Estigarribia. Facturó por servicio de aseo, mantenimiento, reparaciones y mecánica en general a través de dos empresas: Automecánica Ricard y Aaron, ambas fijan dirección en un mismo lugar.
Dejanos tu comentario
“Alevosía del esquema manejado por los hermanos Estigarribia facilitó la investigación”, señalan
El equipo de Investigación de Nación Media presentó nuevamente una prolija investigación que dejó al descubierto la manera en la que el clan Estigarribia, de Villa Elisa, utilizó los recursos provenientes del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide) y de los Royalties para otorgar millonarios contratos de la comuna de manera directa a una constructora que está a nombre de dos jóvenes que, difícilmente tengan la capacidad financiera para asumir millonarios compromisos en las obras públicas.
Para conocer mejor el trabajo investigativo, el diario La Nación/Nación Media dialogó con la responsable del equipo de Investigación, Rossana Escobar, quien señaló que este trabajo arrancó a partir de denuncias que llegaron a su sección, sobre el estado de las calles y una red de empresas que estarían blindando enriquecimiento de los hermanos Ricardo y Sergio Estigarribia, actual gobernador de Central e intendente municipal de Villa Elisa, respectivamente.
Nota relacionada: Bella joven de Villa Elisa y cuñado del intendente llevan millones de Fonacide
Explicó que dichas denuncias les llevó a investigar sobre las licitaciones, rendiciones de cuentas, contrataciones de personal y otros temas que más adelante estarán revelando a través de las diferentes plataformas del grupo Nación Media.
El trabajo investigativo arrancó indagando las rendiciones de cuentas de la Contraloría General de la República, que fueron claves, según resaltó Escobar. “La alevosía del esquema manejado por los hermanos Estigarribia facilitó de alguna manera llegar a la información”, señaló.
Fue así que hurgando los documentos de la ejecución del Fonacide y del Royalties descubrieron que una joven señorita de 27 años, de modesto origen, residente del barrio Ypatî de Villa Elisa, de nombre Natalia Magalí Duarte Yeruta, junto con Eduardo Manuel Mendoza Amarilla, hermano de María Esther Millán Amarilla, esposa del actual intendente de Villa Elisa, figuran como prósperos accionistas de la constructora Cospel S.A.
Escobar señaló que la aparición de la nada de la empresa en el rubro de las contrataciones públicas, la corta edad de sus accionistas y la exclusividad de contratos en la municipalidad, “nos ayudaron a hallar la veta”. Esta firma, Cospel S.A., fue la empresa a la cual los hermanos Ricardo y Sergio Estigarribia adjudicaron millones de guaraníes mediante una treintena de contratos en tiempo récord.
La investigadora señaló que mediante estos contratos otorgados por el clan Estigarribia a Cospel S.A., se beneficiaron con millonarios contratos de licitaciones para la construcción de aulas, reparación de escuelas con recursos del Fonacide, pero además ganaron contratos para el arreglo de plazas y calles de distintos puntos de la ciudad, con los recursos de Royalties.
“Todas las adjudicaciones de manera directa y por vía de la excepción”, precisó Escobar. Como adelanto, la periodista señaló que para la edición de este martes 28 de mayo, se prepara sobre algunas de las “herencias” que dejaron estas millonarias y privilegiadas adjudicaciones.
Finalmente, Escobar lamentó que las instituciones de control del Estado sean limitadas y difícilmente cuenten con los recursos de tiempo, fondos y personal para hacer una pesquisa con cruces de rendiciones de cuentas. “Pero esto ya salió a la luz, es momento de que los organismos de control investiguen sobre los datos que salieron a la luz”, concluyó.
Siga informado con: Gobierno analizó plan de política energética con profesionales del sector
Dejanos tu comentario
Bella joven de Villa Elisa y cuñado del intendente llevan millones de Fonacide
Una joven señorita de modesto origen de Villa Elisa junto con el cuñado del actual intendente, que en realidad se dedica a la actividad ganadera en el Chaco, figuran como accionistas de una empresa constructora que se adjudicó millonarios contratos en la municipalidad de la mencionada ciudad de manera directa con fondos provenientes del Fonacide y los royalties.
- Por Rossana Escobar M.
- rossana.escobar@nacionmedia.com
Por excepción y contratación directa el clan Estigarribia, conformado por el ahora gobernador de Central, Ricardo Estigarribia Medina, y el intendente de la ciudad de Villa Elisa, Sergio Estigarribia Medina, tornaron prósperos empresarios de la construcción a dos jóvenes, uno de ellos de modesto origen, que difícilmente tengan la capacidad financiera para asumir millonarios compromisos en las obras públicas.
Natalia Magalí Duarte Yeruta, una señorita de 27 años de modesto origen y nivel social medio, según pudimos constatar cuando visitamos su residencia del barrio Ypatî en Villa Elisa, es una de las accionistas de Cospel SA, empresa a la que los hermanos Ricardo y Sergio Estigarribia adjudicaron millones de guaraníes mediante una treintena de contratos en tiempo récord. En la firma figura también un joven de Benjamín Aceval de nombre Eduardo Manuel Mendoza Amarilla, hermano de María Esther Millán Amarilla, esposa del actual intendente de Villa Elisa.
Ambos jóvenes (accionistas en los papeles) tienen actividades muy distintas a las de un contratista de obras, según se puede apreciar en sus redes sociales que, en el caso de Natalia, fueron restringidas tras nuestra visita a su residencia. La joven de Villa Elisa es la que aparece como firmante de los contratos con la municipalidad y los hermanos Ricardo y Sergio Estigarribia.
Rendiciones de cuenta de los fondos provenientes del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide) y de los royalties, a las que accedimos a través de la Contraloría General de la República (CGR), revelan contrataciones por excepción y de manera directa, adjudicadas en menos de dos años y que sumadas a los montos publicados en el portal de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP) ascienden a un total de G. 3.633 millones.
Cospel aparece en las rendiciones de Fonacide, royalties y en el portal de la DNCP con adjudicaciones exclusivamente en la Municipalidad de Villa Elisa, gracias a los hermanos Estigarribia. Coincidentemente, tres meses después de que Ricardo Estigarribia asumiera como gobernador de Central, la empresa en la que aparece el cuñado acevalense y la modesta joven de Villa Elisa comenzó a adjudicarse contrato en la gobernación, pero para la provisión de toldos y mesas.
El caso de la modesta joven de Villa Elisa y el cuñado de Sergio que asumen la sociedad de la empresa Cospel no es un hecho aislado, el modus operandi de inflar los bolsillos de la familia tiene como fachada a otras empresas. Es así como el clan Estigarribia además de obras tiene negocios detrás de licitaciones de contratos de almuerzo escolar, mecánica, etc.
El gran cuñado
Asispar SA, empresa a la que Ricardo Estigarribia adjudicó contratos por almuerzo escolar, está vinculada a otro cuñado.
Ricardo Fernández Campuzano, pareja de Gladys Zunilda “Nuni” Medina Galeano, hermana criada por la familia Estigarribia. Según documentos proveídos por la Abogacía del Tesoro del Ministerio de Economía, registra 44 % de las acciones en la proveedora de la Municipalidad de Villa Elisa beneficiada con contratos durante la administración de Ricardo Estigarribia.
En Asispar SA también aparece Rosa Nathalia Zena con el 46 % de las acciones. La mujer es pareja de Víctor Manuel Núñez Samaniego, un funcionario del Ministerio de Hacienda que figura como síndico en actas de asamblea de la citada proveedora y es socio de la familia del intendente y el gobernador en otra empresa en la que registran millonarios aportes en efectivo.
El gran cuñado Ricardo Fernández Campuzano, multifacético y próspero en los negocios con la comuna, registra facturaciones por servicio de aseo, mantenimiento, reparaciones y mecánica en general.
En los documentos que obran en la Contraloría figuran facturaciones del gran cuñado Ricardo Fernández Campuzano a través de dos empresas, gracias a los contratos que le adjudicó Ricardo Estigarribia con fondos de los royalties.
Automecánica Ricard, que registra actividad en el rubro talleres, y Aarón, del rubro comercio de ramos generales, firmas que fijan una misma dirección, son las empresas con las que facturaba el gran cuñado Ricardo Fernández Campuzano, principalmente en tiempos de la pandemia cuando la crisis económica afectaba a miles de comerciantes, emprendedores, etc.
Pareja de joven “constructora” es ordenanza del intendente
Nuestro equipo intentó conversar con la joven que funge de contratista de obras que acapara adjudicaciones en Villa Elisa. Visitamos su residencia, pero Natalia se hizo inencontrable y en la casa donde vive, según nos confirmó una vecina, nos atendió un muchacho que señaló que ella ya no reside allí.
Fuimos a buscar a su pareja, Ángel Gustavo Talavera, en el intento de poder contactar con la joven contratista de la municipalidad.
Cabe subrayar que Ángel Gustavo es empleado leal al clan Estigarribia, percibe un sueldo de G. 3.500.000. De hecho, el hermano de Ángel Gustavo, de nombre Miguel Enrique Talavera, que también es funcionario municipal, nos confirmó: “Justamente está llegando hína con lekaja, con él lo que siempre está, con el intendente”, refiriéndose a Sergio Estigarribia y muy gentilmente nos facilitó un número para comunicarnos con el mismo.
Llamamos a Ángel Gustavo y en comunicación telefónica se reservó datos sobre su pareja Natalia Duarte Yeruta, una de las accionistas de Cospel, y al ser consultado dónde lo podemos ubicar para una entrevista sobre el tema, así como sus funciones en la municipalidad y vínculos con el intendente, evitó responder diciendo: “No tengo nada que responderles a ustedes”. Facilitamos número de contacto por si la joven quisiera brindar su versión, pero no tuvimos retorno.