Después de una semana renqueante, Novak Djokovic volvió. Sin resentirse de su lesión en la pierna izquierda, el astro serbio se mostró pletórico ayer lunes para avanzar a los cuartos de final del Abierto de Australia con una lección ante la última esperanza local.
En poco más de dos horas, el serbio de 35 años endosó un contundente 6-2, 6-1, 6-2 al australiano Álex de Miñaur que, a pesar del apoyo del público de la Rod Laver Arena, no pudo hacer nada contra el nueve veces ganador de este Grand Slam que, liberado del dolor, ya piensa en el trofeo.
“Hace una semana, no pensaba en el título, solo pensaba en estar en condiciones para jugar el próximo partido. Hasta esta noche. Esta noche, de la forma que he jugado y me he sentido, me da motivos para creer que puedo ir hasta el final”, afirmó en rueda de prensa.
En cuartos, se enfrentará a Rublev que, incluso antes de conocer su oponente, reconocía que “nadie quiere enfrentarse a Novak”.
El otro enfrentamiento de cuartos en esta parte del cuadro será 100% estadounidense entre el joven Ben Shelton, el primer debutante en llegar a esta ronda en 20 años, y Tommy Paul, que derrotó al último español en el cuadro, Roberto Bautista.
SABALENKA, IMPARABLE
Quien no vacila es la bielorrusa Aryna Sabalenka, invicta en este 2023 en el que todavía no ha concedido ni un solo set.
Sabalenka (N. 5) avanzó por primera vez a los cuartos de final del Abierto de Australia tras superar a la suiza Belinda Bencic, que consiguió el primer “break” del partido antes de encajar 11 de los siguientes 14 juegos.
En cambio, como la polaca Iga Swiatek o la estadounidense “Coco” Gauff, la francesa Caroline Garcia (N. 4) se sumó a la lista de favoritas eliminadas al caer en dos sets ante la polaca Magda Linette que enfrentará a la checa Karolina Pliskova en sus primeros cuartos de final de un Grand Slam.