En las horas previas a la noche de Reyes, en la región donde cuentan que los tres magos de Oriente iniciaron su viaje, el lituano Vaidotas Zala, de 32 años, se propuso hacer historia.

O quizás ni siquiera se le llegó a pasar por la cabeza. Simplemente no cometió errores, se apro­vechó de los de sus rivales y llevó su nuevo auto –un Mini All4Racing del 2018– estre­nado por primera vez este domingo hasta la meta de Al Wajh, a 500 metros del Mar Rojo.

Vaidotas Zala asegura en conversación con Motors­port.com que no se cree lo que ha conseguido, que ni en sus mejores sueños imaginó batir a los Peterhansel, Sainz y Al Attiyah.

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“Compré esto con un crédito en el banco y estoy un poco asustado ahora”.

Pero ese temor se guarda en la guantera cuando engrana primera y suelta el freno de mano. Zala se ha colado en un club exclusivo sin haberlo siquiera ima­ginado.

“No, estás loco, ¡anda ya!”, responde cuando se le pre­gunta si alguna vez soñó con esto. “Nunca hablé de mis expectativas antes del Dakar, pero esperaba en secreto poder colarme en el top 10 algún día. Pero ganar una carrera está por encima de la razón”.

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