El siempre caudaloso río Paraná ofrece ahora desoladoras imágenes a causa de la bajante histórica que afecta seriamente la vida de quienes viven en sus zonas ribereñas y también a la economía, ya que sus aguas son el “camino” habitual de todo tipo de productos y mercaderías. Para evidenciar el escenario, el equipo del Grupo Nación se trasladó hasta el límite de Paraguay con la Argentina, una zona cercana a la ciudad de Itatí, provincia de Corrientes, donde se podía divisar la Basílica de la Virgen de Itatí, encontrando en el lugar una franja bastante amplia de tierra, con lo que se denota una bajante histórica de uno de los caudales más importantes de la región.El equipo periodístico llegó hasta el límite con la Argentina en medio del río Paraná, a un banco de arena nunca antes visto por los pobladores, que ahora está al descubierto a causa de la bajante, tras ingresar desde la ciudad de Pilar y atravesar unos 50 kilómetros hasta la localidad de Mayor Martínez, en el departamento de Ñeembucú, por el riachuelo Paranamí.