El titular de la Cámara Vial Paraguaya (Cavialpa), Paul Saru­bbi, dijo que este 2025 será un año de reactivación en el sec­tor de la construcción, luego de haberse cumplido los pagos por parte del Estado en 2024. En este primer trimestre del año hay muchos proyectos que ya arrancaron, refirió.

Durante el segundo semes­tre del año pasado, el Estado comenzó a licitar varias obras luego de resolver las deudas con las constructoras. En ese sentido, Sarubbi mencionó que en el primer trimestre de 2025, varios proyectos se pusieron en marcha. “Hoy en día se ven maquinarias en pista, la cantidad de per­sonas contratadas en el sector va subiendo, esta es una clara idea de lo que está pasando. Paralelamente seguimos con nuevas licitaciones”, refirió.

Sarubbi mencionó que el año pasado pudieron resolver los pagos pendientes que tenía el Estado con las constructo­ras y que ahora mismo está al día. “Muchas veces los con­tratos no permiten parar las obras por falta de pago, para eso están previstos los inte­reses para poder recupe­rar los costos financieros al tener que financiarse con el sistema financiero, pero eso es más caro para el Estado”, explicó a la radio 1330 AM. Asimismo, destacó el apoyo que viene recibiendo el sec­tor de la construcción desde el Gobierno. Agregó que las empresas paraguayas deben ser protagonistas dentro de los trabajos que se están ejecu­tando, para poder dar mano de obra a las familias y contribuir al crecimiento del país.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

RUTA DE HORMIGÓN

Por otro lado, Sarubbi abordó la construcción de rutas de hormigón en el marco de la ley que establece la utiliza­ción de pavimento rígido en los proyectos de obras viales a ser desarrollados.

Dijo que esto es factible y hasta estratégico para nuestro país. “Es factible y estratégico porque por un lado es un producto nacio­nal, entonces, tenemos que incentivar los productos nacionales y la plata quede acá”, señaló.

Dentro de la implementación de esta ruta, se deben analizar factores económicos y técnicos para aprovechar al máximo las ventajas que ofrece el hormi­gón frente al asfalto tradicio­nal. En ese sentido, dijo que se debe analizar para cada caso el costo de la vida útil de la ruta y no solo fijarse en el costo inicial que puede ser superior.

Déjanos tus comentarios en Voiz