Un escenario casi cercano a la sequía de 2019 se está empezando a percibir con la falta de lluvias que se viene extendiendo desde la segunda mitad de diciembre de 2024, afectando directamente a los cultivos y en especial a la soja, uno de los productores estrella de Paraguay. Desde el sector productivo piden soluciones técnicas para afrontar los embates del clima.
Si bien el fin de semana cayó agua en algunas zonas, la cantidad fue insuficiente y todavía no se puede estimar un impacto certero de la sequía, debido a que falta el proceso de floración de las variedades intermedias y tardías de los cultivos de soja, además de esperar que llegue un frente con precipitaciones ideales que puedan contrarrestar el déficit hídrico que se está dando en las principales zonas de siembra, como en el norte de la región Oriental.
El presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), Héctor Cristaldo, habló con La Nación/ Nación Media acerca del panorama actual de posibles pérdidas que se puedan dar a raíz de la escasez hídrica y estrés en las plantas que atenta contra las proyecciones iniciales. Lo que sí aseveró el titular del gremio es que ya no se llegará a la proyección inicial de los 11.000.000 de toneladas del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), pues con la tempranera ya afectada más estar a merced de las lluvias, efectivamente impactará en la producción de la soja paraguaya, ya que según los últimos datos el 80 % del área sembrada está con déficit hídrico.
Aunque todavía no se acerca a la sequía de 2022, que fue una de las más fuertes e impactante, puesto que de la estimación de 10.000.000 de toneladas bajó a 4.000.000 incluso, con una pérdida económica del 60 %.
PREOCUPACIÓN
Por su parte, el presidente de la Federación de Cooperativas de Producción (Fecoprod), Alfred Fast, expresó su preocupación por la situación que atraviesa el campo, especialmente en la región norte, aunque también en sur y este. En conversación con La Nación dijo que hay lugares donde se va a cosechar levemente por la falta de lluvias. “Todo parecía muy lindo hasta Navidad, pero ahora en San Pedro por ejemplo, todo está muy seco. La pastura ya no crece más, los cultivos tanto de soja como maíz están afectados. Nosotros sabemos que aquí en cinco años vamos a tener al menos dos años difíciles, pero que sean cuatro años de seguido, ya no es normal”, manifestó el titular de la Fecoprod.
Sobre los productores y el ambiente que se vive en el rubro, Fast indicó que con los diferentes gremios están trabajando junto a las cooperativas y los pequeños productores, para buscar soluciones a esta situación que les afecta. “Estamos buscando soluciones con el Gobierno e instituciones financieras. No está linda la situación, pero no podemos perder las esperanzas”, sostuvo.