Félix Sosa, titular de la Ande, destacó las inversiones realizadas por la entidad en los últimos años, además del plan maestro para el futuro cercano, que hasta el 2030 se destinará más de USD 4.554 millones (el 30 % ya tiene financiamiento) para adaptar el sistema eléctrico paraguayo.
- Por Joel Corvalán
- ¿Cuáles han sido las inversiones que se han dado en el último año en la Ande, que buscan disminuir los cortes de energía en temporada estival?
-La Ande está llevando adelante importantes obras de infraestructura en las áreas de transmisión y distribución de energía eléctrica cuya inversión supera los 590 millones de dólares. En el año 2024, el importe total ejecutado en inversiones físicas superó los 2,2 billones de guaraníes (unos USD 285,4 millones). En el área de transmisión, y específicamente en el Sistema Metropolitano, en donde se registra más del 50 % de todo el consumo nacional, se ha incrementado en 5 subestaciones, 250 MVA de potencia a nivel de 23 kV, se ha realizado el cambio de conductores de la línea de transmisión que une las subestaciones San Estanislao y Carayaó. Asimismo, la futura Subestación Valenzuela en 500 kV, obra estratégica que permitirá el fortalecimiento del sistema eléctrico paraguayo y ampliará las condiciones para la industrialización de nuestro país, se encuentra al 95 % de su construcción. En el área de distribución, a nivel país, se han instalado nuevos transformadores de distribución, aumentando así una potencia de 318 MVA; se ha realizado el mantenimiento integral de 213 alimentadores en 23 kV, se ha reforzado y/o construido 73 alimentadores en 23 kV y se han cambiado 408 km de conductores desnudos por conductores protegidos en 23 kV.
A las obras mencionadas al principio, se deben agregar otras obras de infraestructura a ejecutar a muy corto plazo, tales como la construcción de la segunda línea de transmisión del Chaco, que partirá de la subestación Villa Hayes hasta Loma Plata, con la construcción de una subestación en Pozo Colorado; así mismo, la construcción de la segunda línea de transmisión en 500 kV que unirá margen derecha de Itaipú con la subestación Villa Hayes y obras complementarias en el Sistema Metropolitano. Estos dos proyectos demandarán unos 415 millones de dólares.
Además, se tiene prevista la ejecución de 10 proyectos bajo la modalidad del Leasing Operativo, por un monto aproximado de 190 millones de dólares. Estos proyectos corresponden a: ampliación de la subestación Villa Hayes con la instalación del cuarto Banco de Transformadores, Ampliación de la Subestación Ayolas con la instalación del tercer Autotransformador y la Construcción e Interconexión de las subestaciones Zárate Isla, Carmelo Peralta, Barcequillo, Autódromo, Ypé Jhu, Mbaracayú, Nueva Esperanza y Villa Franca.
-Algunos advierten que las inversiones eran insuficientes. Si bien esto en parte es real, la Ande se volcó a ofrecer energía confiable y de calidad. ¿Cuánto se proyecta invertir hasta el 2030? ¿Es factible ejecutar los USD 5.800 millones que se contempla en el plan maestro del 2030?
-Las inversiones que corresponden a los nuevos Planes Maestros de Transmisión y Distribución de Corto y Mediano Plazo para el periodo 2024-2033, hasta el periodo 2030, representan un monto estimado de unos 4.554 millones de dólares. De este monto, alrededor del 30 % ya cuenta con financiamiento (esto representa un monto de 1.353 millones de dólares). Es importante mencionar que los planes maestros son indicativos y su cumplimiento traería el aumento de la capacidad para atender la creciente demanda con redundancia, confiabilidad y flexibilidad operativa dentro de los estándares del sistema.
-Sobre el plan maestro de energía, tema central para la Ande. La energía excedente de las binacionales tiene fecha de vencimiento y a partir de allí habrá que pensar en nuevas fuentes de energía. ¿Cuál es el plan en este sentido?
-Los planes de abastecimiento de energía eléctrica del Paraguay, descritos en el nuevo Plan Maestro de Generación de Corto, Mediano y Largo Plazo para el periodo 2024-2043, se enfocan en garantizar la seguridad energética, diversificar la matriz de generación eléctrica y expandir la cobertura de forma sostenible. Para ello, la Ande ha desarrollado diferentes escenarios para hacer frente a dichos requerimientos. En las diferentes alternativas se pueden destacar algunos puntos relevantes como:
1. Diversificación de fuentes energéticas: incorporación de tecnologías como paneles solares fotovoltaicos, pequeñas centrales hidroeléctricas, baterías de litio y centrales de bombeo de almacenamiento de energía para optimizar la generación y cubrir demandas pico.
2. Adaptación al cambio climático: desarrollo de energías renovables no convencionales para reducir la dependencia de la hidroelectricidad y garantizar el suministro en periodos de sequía.
3. Plan Nacional de Electrificación (2024-2028): proyectos destinados a alcanzar el acceso universal a la electricidad con fuentes 100 % renovables, priorizando comunidades rurales y áreas de difícil acceso.
4. Integración regional: colaboración con países vecinos en el desarrollo de proyectos de centrales hidroeléctricas binacionales e iniciativas de transporte energético, como el potencial gasoducto desde la República Argentina.
-En relación con ese plan maestro y la reconversión energética, que incluya más fuentes de generación de energía, ¿ qué tan importante es el aporte que se pueda dar con Itaipú? ¿Este parque solar en el embalse de la represa es un objetivo real?
-Considerando el período 2025-2030, la previsión de la demanda de potencia y de energía, así como la oferta de potencia y energía, considerando las fuentes de generación existentes, demuestran que existen aún márgenes de potencia y energía. No obstante, el nuevo Plan Maestro de Generación de Corto, Mediano y Largo Plazo para el periodo 2024-2043 prevé la incorporación de nuevas fuentes de generación, con tecnologías innovadoras en el Sistema Interconectado Nacional (SIN), principalmente la generación fotovoltaica por su gran potencial, el almacenamiento de energía eléctrica en bancos de baterías de litio, pequeñas centrales hidroeléctricas en los ríos internos, y centrales de bombeo.
Con la incorporación de nuevas centrales de generación al SIN, se apunta a expandir la capacidad de generación para atender el crecimiento vegetativo de la demanda, así como la incorporación de nuevas demandas potenciales, diversificando la matriz de producción energética. En este contexto, la posibilidad de que la Central Hidroeléctrica de Itaipú decida en un futuro la instalación de paneles solares en su embalse a gran escala permitiría aumentar la seguridad energética de la República del Paraguay, sobre todo en los periodos de baja hidraulicidad. Actualmente, Itaipú se encuentra en fase de estudio y de evaluación para la construcción de una primera planta fotovoltaica flotante piloto de 1 MW sobre su embalse.
-¿De qué manera trabaja la Ande para minimizar las pérdidas de energía, ya sea esta técnica o comercial?
-En el año 2024, la Ande incrementó la cantidad de verificaciones de suministros, tal es así que se llegaron a ejecutar más de 24.000 verificaciones; de estas, alrededor del 15 % correspondió a usuarios conectados en forma directa a la red de la Ande y casi el 6 % fueron detectados irregularidades de clientes, a los cuales se aplicaron multas y denunciados al Ministerio Público.
Se realizaron operativos conjuntos de la Gerencia Comercial y la Dirección de Gestión Regional en Asunción y los departamentos Central, Alto Paraná, Itapúa y San Pedro, en los que se realizaron cortes por conexión directa, verificaciones de suministros y cortes de suministros por impago.
CAMPAÑA CONTRA LA CRIPTOMINERÍA ILEGAL
-En 2024 hubo una agresiva campaña contra la criptominería ilegal que ha tenido resultados con el desmantelamiento de decenas de mineras clandestinas. ¿Qué impacto tenía a nivel técnico y qué sangría económica provocaban a la Ande estas empresas?
-Indudablemente la promulgación de la Ley 7300/2024, que establece penas de cárcel de hasta 10 años y la incautación total y decomiso de equipos utilizados para la sustracción de energía eléctrica, ha contribuido considerablemente a la gestión de la Ande en el combate a las pérdidas. Se han implementado diversas estrategias para combatir el robo de energía eléctrica, que afecta tanto los ingresos, la calidad del servicio y la infraestructura del sistema. La lucha contra la criptominería ilegal fue crucial; mediante un despliegue coordinado con el Ministerio Público y la Policía Nacional, donde en el año 2024 se intervinieron 33 granjas de criptominería de gran porte, cuya potencia total instalada era de 89 MW, aproximadamente, y que equivale a casi el 50 % de lo que genera la represa de Acaray. Esto representó un daño patrimonial aproximado de G. 18.690 millones de manera mensual.
En ese contexto, desde el año 2019 se tienen un total de 85 causas abiertas por sustracción de energía eléctrica para actividad de criptominería y permitieron la incautación de unas 12.000 máquinas procesadoras de criptomonedas, 58 transformadores de distribución. Actualmente se tienen dos causas con condenas y 16 personas imputadas, todas por sustracción de energía eléctrica.
SOTERRAMIENTO DE CABLES EN EL CASCO HISTÓRICO
-Arrancó la segunda etapa de Palma Brilla, que contempla el soterramiento de unas 50 manzanas del centro de Asunción. ¿Qué puede comentar sobre este proyecto?
-Es así. Es un ambicioso proyecto que buscar revitalizar el casco histórico del centro de Asunción, con el soterramiento de cables y la mejora de la iluminación pública, tal como ya se había realizado con el proyecto Palma Brilla.
El proyecto tiene previsto soterrar cables de baja tensión, media tensión y de señales débiles de unas 50 manzanas (en ambas aceras de cada calle), asimismo, incluye la instalación de 500 unidades de alumbrado público tipo LED de alta eficiencia en postes troncocónicos de 9 metros (entonces implica que se retirarán todos los postes actualmente existentes).
La misma corresponde a una iniciativa de la Oficina de la Primera Dama y se tiene previsto culminar los trabajos en 18 meses con una inversión total de unos 50.000 millones de guaraníes, financiados con fondos propios de la Ande.