El sector industrial, una de las aristas fundamentales para el crecimiento y desarrollo eco­nómico del país, termina un año muy positivo y multifacé­tico, señalan. Pues, más allá de los números fríos de la macro­economía, el impacto directo e indirecto en las personas, en los paraguayos es, sin duda, su distintivo. Según la Unión Industrial Paraguaya (UIP), este segmento se encuentra en condiciones para liderar la expansión económica del 2025. En una entrevista con el dia­rio La Nación/Nación Media, el presidente del gremio, Enrique Duarte, compartió el alcance de los datos y cómo la proyec­ción de crecimiento para este 2024 de 3,8 % de la industria se traduce en beneficio de los paraguayos, así como las pro­yecciones para el próximo año.

“El sector se destacó en la crea­ción de empleo, posicionándose como el segundo generador de mano de obra en el tercer tri­mestre del año. El crecimiento industrial impactó considera­blemente en el bienestar de la población, lo que permitió el aumento de más fuentes de tra­bajo de un 6,6 %”, expresó. Este sector secundario de la econo­mía, emplea a más de 550.000 personas y representa el 32,1 % del producto interno bruto (PIB).

Este aumento del empleo en la industria es crucial, ya que se trata de puestos de trabajo for­males y mejor pagados que en otros sectores, lo que contri­buye a mejorar la calidad de vida de los trabajadores y a reducir la pobreza. La industria ofrece a sus trabajadores salarios que le permiten acceder a una vida de calidad y digna, ya que es el segundo sector con la población ocupada de mayor ingreso men­sual, explicó el titular de la UIP.

En ese sentido, indicó que el Centro de Estudios Económi­cos (CEE) de la UIP analizó la calidad de empleo de los dis­tintos rubros de la economía y encontró que el sector secun­dario es uno de los que ofrece mayor calidad de empleo. Esto quiere decir que la población ocupada del segmento posee un salario que le permite estar fuera de la pobreza, cuenta con seguro médico y jubilación. Así también, en términos de infor­malidad, el sector manufactu­rero es aquel que se encuen­tra con menores tasas. Otro hallazgo interesante del CEE, en base a una encuesta, es que la mayoría de los ocupados del sector poseen sueldos que van por encima del salario mínimo, lo que se condice con la calidad de empleo que se ofrece.

Respecto a los logros durante este 2024, Duarte remarcó avances en la protección y defensa de la industria nacio­nal, como la firma del decreto que establece como política de Estado el impulso a la industria metalúrgica, un sector clave para la generación de empleo y el desarrollo económico. Además, celebran la diversi­ficación de las exportaciones, tanto en productos manufac­turados como en destinos, con un alcance global. “Este es un paso significativo hacia la con­solidación de nuestra industria en el comercio mundial”, dijo.

El fortalecimiento de las mipymes seguirá siendo uno de los ejes fundamentales de trabajo en la UIP, ya que reconocen que son el motor del desarrollo económico y social, por lo que continuarán promoviendo su acceso al financiamiento, brindando capacitaciones, fomentando la innovación y apoyando su integra­ción en cadenas de valor nacionales e internacionales. Esto, a través de la amplia gama de servicios del gremio. Lograr un acceso eficiente al financiamiento y fortalecer a las mipymes generará un efecto multi­plicador en la economía, impulsando mayor inversión, empleo y desarrollo social. “Estamos comprometi­dos con consolidar un sector industrial competitivo, inclusivo y preparado para liderar el crecimiento sos­tenible del país en 2025″, puntualizó Enrique Duarte, titular de la UIP.

En cuanto a las proyecciones, como ya se anticipó al inicio de este material periodístico, el presidente de la UIP, Enri­que Duarte, subrayó que en el 2025, liderarán la expansión económica. Y es que la indus­tria avanzó en temas rele­vantes para el sector, como la agenda de financiamiento industrial, estableciendo alianzas con bancos multila­terales y con el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF). Sin embargo, aún queda pen­diente mejorar los plazos y tasas de interés de los crédi­tos, un aspecto crucial para potenciar la inversión en la ampliación de plantas, la modernización de equipos y el aumento de la producción, sostuvo Duarte.