El Banco Mundial (BM) compartió su último informe sobre Paraguay, esta vez con relación a la reducción de la pobreza, que según sus indicadores lo hizo en un 26,7 % durante las últimas dos décadas. El boletín indica que la disminución fue de 51,4 % al 24, 7 %.
Se trata del reporte de Pobreza y Equidad para Paraguay: “Estrategias para Potenciar el Crecimiento Inclusivo y la Reducción de la Pobreza”, que engloba además que la clase media experimentó un aumento del 24,8 % de la población en 2003 al 41,6 % en 2022. “Paraguay ha tenido logros importantes en mejorar las condiciones de vida de su gente. La pobreza moderada disminuyó de 51,4 % en 2003 a 24,7 % en 2022, mientras que la pobreza extrema cayó al 5,6 %”, expresa Eliana Rubiano-Matulevich, economista senior del Banco Mundial para Paraguay y Perú.
CRECIMIENTO ECONÓMICO
Señaló además que el crecimiento económico de Paraguay fue el principal motor detrás de este proceso, representando dos tercios de la reducción de la pobreza durante el período indicado, que analizó la situación actual de la pobreza y desigualdad, con lo que se pudo identificar áreas claves para acelerar la reducción.
El informe saca a relucir la importancia de políticas públicas enfocadas en mejorar el acceso y la creación de empleos de calidad, potenciar el capital humano, y fortalecer la resiliencia del país ante choques climáticos para impulsar un crecimiento económico inclusivo y sostenible. Con relación al aumento de la población de la clase media, mientras que el ritmo de reducción de la pobreza disminuyó desde 2014, señala que fue debido a desafíos globales recientes como la pandemia, sequías y presiones inflacionarias internacionales que afectaron a la economía.
Tales situaciones develan la importancia de fortalecer la resiliencia climática del país, se explica. Asimismo, la urbanización de la pobreza y las disparidades en educación y empleo también contribuyeron a esta desaceleración, destacando la necesidad de políticas inclusivas y dirigidas para abordar estas desigualdades.
SOCIEDAD MÁS EQUITATIVA Y RESILIENTE
A su vez, el representante residente del Banco Mundial en Paraguay, Harold Bedoya, destacó que: “Paraguay está en un punto de inflexión en su trayectoria de desarrollo. Con las políticas adecuadas y un compromiso continuo con el crecimiento inclusivo, el país tiene el potencial de no solo erradicar la pobreza extrema, sino también de construir una sociedad más equitativa y resiliente”, sostuvo.
Agregó que el informe proporciona una hoja de ruta para lograrlo, basada en evidencia rigurosa y adaptada al contexto único de Paraguay, como una especie de recomendaciones encabezadas por inversión en capital humano, generación de empleos de calidad, fortalecimiento del sistema fiscal y aumento de la resiliencia climática.