La empresa logró superar los obstáculos y posicionarse como líder en la industria.

Así como otras industrias del país, Pechugon enfrentó numerosas dificultades, desde la enfermedad de Newcastle, la falta de energía eléctrica, las limitaciones tecnológicas hasta la competencia desleal y las fluctuaciones económicas de los países vecinos. Es lo que explicó Blanca Ceuppens Talavera, presidenta de Granja Avícola La Blanca SA al hablar de Pollos Pechugon.

Si bien comenzaron con modestos recursos, tenían claro a dónde querían llegar. Gracias a la perseverancia, al compromiso con la calidad y la innovación, lograron superar los obstáculos y posicionarse como líder en la industria. “Cada paso que dimos estuvo orientado hacia la mejora continua y la adaptación a las necesidades del mercado, lo que nos permitió no solo mantenernos en el juego, sino también expandirnos y crecer”, dijo al mencionar que la consolidación de la industria nacional fue un proceso largo y lleno de desafíos.

Actualmente, Pechugon es la marca que lidera en recordación, ventas y preferencia tanto a nivel local como internacional en una amplia gama de productos avícolas que van desde pollos frescos y congelados hasta productos elaborados, como milanesas, brochetas y nuggets.

“Nos enorgullece decir que nuestras marcas se han convertido en sinónimo de calidad en el sector. Están diseñados para satisfacer las diversas necesidades de nuestros consumidores. Además, nuestras certificaciones internacionales, como FSSC 22000 y HALAL, nos permiten garantizar que cada producto que sale de nuestras instalaciones cumple con los más altos estándares de calidad y seguridad alimentaria”, agregó la titular de Granja Avícola La Blanca SA.

Blanca Ceuppens recuerda que convierten maíz y soja en carne, dando un importante valor agregado a los cereales. “Se adquieren aproximadamente 130.000 toneladas de maíz y 45.000 toneladas de soja para la producción de alimentos balanceados naturales”, comentó a LN/NM.

Al hablar de la satisfacción que tienen como empresa, Blanca Ceuppens mencionó el trabajo que impacta positivamente en la vida de las personas, no solo en términos de los productos que ofrecen, sino también en cómo generan empleo y contribuyen al desarrollo económico del país. “Saber que nuestras acciones están ayudando a alimentar a miles de familias y que, a través de nuestras prácticas sostenibles, estamos cuidando el medioambiente para las futuras generaciones, es lo que nos motiva a seguir adelante cada día”, aseguró.

Comentó también que el reconocimiento de los clientes y la lealtad que han demostrado hacia las marcas son fuentes de orgullo. Aseguró que los paraguayos deben dimensionar el alcance que tiene en abastecerse con alimentos.

Uno de los mayores desafíos para Pechugon es la constante evolución del mercado, considerando que la competencia en la zona es feroz, sobre todo por los volúmenes a escala de los países vecinos. “Para mantener nuestra posición, debemos seguir innovando y adaptándonos a las nuevas tendencias y demandas del consumidor. Además, la amenaza del contrabando”, indicó.

Se refirió, asimismo, a las fluctuaciones en los costos de los insumos básicos como el maíz y la soja, que son obstáculos significativos. Sin embargo, desde Pechugon apuestan al país, por lo que, con dedicación a la calidad, “nuestro enfoque en la sostenibilidad y la inversión en tecnología nos permitirá seguir adelante y continuar siendo una fuerza competitiva en el mercado”, indicó.