En las pizarras de las principales casas de cambio, la cotización de la divisa estadounidense arrancó la semana en G. 7.570 a la venta (mercado minorista), que implica un nuevo tope para lo que va del año y refleja una presión al alza constante. Esta tendencia se mantendría a lo largo del segundo semestre, impulsada por un mayor volumen de importación y una menor disponibilidad de dólares en el mercado.
La misma realidad se evidencia en el mercado interbancario (mayorista) donde, según las estadísticas del Banco Central del Paraguay (BCP), la cotización alcanzó la semana pasada los G. 7.589. En general, los registros dan cuenta de que el guaraní acumula una depreciación de 4 % en lo que va del año, desde los niveles de G. 7.290 a la venta en enero hasta los G. 7.570 (en la víspera), casi G. 300 en puntos nominales.
La suba de la moneda extranjera coincide con la época de mayores niveles de importación, tanto para la preparación de la producción agrícola como para las compras con miras a las fiestas de fin de año, que genera mayor erogación de dólares en el mercado hacia el exterior. No se puede descartar además las presiones externas sobre la divisa estadounidense y la devaluación regional de las monedas por la aún elevada tasa de referencia en Estados Unidos, que se suma al crecimiento sostenido de las importaciones locales.
INYECCIÓN DEL BANCO CENTRAL
En lo que va del año, la banca matriz inyectó alrededor de USD 860 millones para cortar los picos de la tendencia alcista del tipo de cambio, que sigue presionando al alza y se mantiene constante. Al realizar una comparación de la evolución del dólar con el periodo 2023, dada la tendencia del tipo de cambio, se estima que es probable que las operaciones compensatorias continúen. De hecho, según los resultados de la encuesta de Expectativas de Variables Económicas de la institución económica, en el mercado se espera un dólar más caro para el cierre de año. Ahora, se cree que la cotización finalice el 2024 en torno a los G. 7.590, conforme a los encuestados.