El presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), Héctor Cristaldo, afirmó que las condiciones a ser establecidas para las exportaciones paraguayas por parte de la Unión Europea (UE) representan un peligro para el desarrollo del país, especialmente para los pequeños productores.
Cristaldo sostuvo que esto apunta directamente a frenar el desarrollo productivo nacional y la cadena de valor que existe detrás. “Estamos preocupados porque todo lo que apunta a frenar el desarrollo del Paraguay, lo consideramos como una amenaza para el país. Sobre todo para los pequeños productores que con mucho esfuerzo están saliendo de la pobreza, al incorporarse a la cadena de valor”, dijo a la 780 AM.
El mismo precisó que unos 264.000 pequeños productores que trabajan en menos de 50 hectáreas serán excluidos del mercado por no poder estar a la altura de las exigencias europeas. También mencionó que el Mercosur se encuentra negociando desde hace 20 años el acuerdo con la UE y que hasta hoy no se formaliza y que para ejecutarlo podrían introducir una adenda que obligue a los países a cumplir con esta disposición.
“Es una adenda que quieren introducir por la ventana, dentro del acuerdo; el reglamento 1115, que es una ley europea. Entonces la ley europea va a entrar a regir en Mercosur, más que nuestras propias leyes”, cuestionó.
También detalló que las exportaciones paraguayas a Europa en los últimos tres años no pasan los USD 400 millones, en promedio, y que Paraguay exportó al mundo USD 11.890 millones, aproximadamente, en 2023. “Esto quiere decir que no es el mercado más importante y vamos a poner en riesgo a nuestro país por entrar en este juego. Esto es peligroso, creemos que Paraguay tiene mucho por crecer. Estamos en un proceso de desarrollo sostenible y no lo podemos frustrar ahora”, aseveró.
La UGP considera que el rechazo al esquema de trazabilidad es operativamente inviable, puesto que generaría demoras y sobrecostos innecesarios a los productores y exportadores agrícolas, e insisten en que el diálogo es el camino para el trabajo conjunto.
EXIGENCIAS DE UE DEBERÍAN SER GRADUAL
El vicepresidente de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), Hugo Pastore, explicó que las pretensiones de la Unión Europea “son muy difíciles” y que no se observa una apertura para entender las realidades de cada país. Se prevé que la reglamentación entre en vigencia el 1 de enero de 2025, pero debería tener un tipo de gradualidad. “Las formas en que la UE pretende que se le entregue informaciones requieren tiempo, se tienen que desarrollar sistemas.
Hemos presentado un cuestionario que fue respondido en parte y muchas de las preguntas ni ellos consiguen responder”, comentó Pastore en comunicación con La Nación/Nación Media.Aseveró que es una medida que se podría llegar a desarrollar, pero se necesita tiempo para ir cumpliendo parcialmente en un periodo determinado o plazo de varios años. “Ellos van a hacer una evaluación si los países son de riesgo alto, medio o bajo. Se presentó un documento país sobre lo que venimos haciendo y una cuestión no menor es que el Chaco está con el 60 % de su territorio con estrictas medidas de cambio de uso de suelo”, apuntó.