Desde la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) indicaron que las políticas públicas en las que el Gobierno podría incidir en el año 2024 se resumen en cuatro ejes principales.
Esperan que se impulsen acciones enfocadas en el desarrollo y la integración de todas las cadenas productivas porque esto permitirá explotar el potencial del sector agroindustrial, generar una mayor cantidad de empleos y promover el desarrollo sostenible.
En comunicación con La Nación/Nación Media, Sandra Noguera, gerente general del gremio, manifestó que, a pesar de la recuperación de la producción primaria, las condiciones de competitividad de la agroindustria distan de alcanzar su potencial e, incluso, siguen deteriorándose.
Además, la participación de las aceiteras en la exportación de soja en estado natural se incrementó durante este 2023.
EQUIPARACIÓN TRIBUTARIA
Es por eso eso que se precisa un esquema de equiparación tributaria para la industria aceitera con relación al resto de los demás sectores exportadores. “Actualmente es la única que no tiene derecho a la devolución del IVA al exportar productos industrializados que reconozca el derecho a la devolución del 100 %”, dijo Noguera a LN. Así también, pidió que siga la lucha frontal y permanente contra el contrabando, para lo cual deben unir esfuerzos las diferentes instituciones públicas competentes siendo imperativo hacer cumplir las reglas de producción, almacenamiento y comercialización, informar sobre los peligros para la salud de las personas y sembrar conciencia sobre cómo afecta a la economía nacional.
REDUCCIÓN DE LA INFORMALIDAD
Sandra Noguera, gerente general de la Cappro, destacó el esfuerzo, compromiso y los avances de la nueva administración por reducir los niveles de informalidad que afectan al trabajo formal, pues en su sector, de acuerdo a la última estimación realizada al cierre del tercer trimestre del año, el comercio ilegal mensual de aceites y grasas vegetales representó el 52 % (unas 4.030 toneladas) del consumo total mensual del país (7.700 toneladas), registrándose de esta manera una reducción de 4 puntos porcentuales con relación al mes de abril de este año.
Además, se debe continuar trabajando para asegurar la producción sustentable, de modo de que el país se adapte a las exigencias de los consumidores; además, otro de los requisitos más urgentes es el establecimiento por ley del régimen de admisión temporaria para importar materias primas agrícolas. “El sector de la agroindustria es un sector clave para el crecimiento económico a largo plazo de nuestro país y necesita de un apoyo gubernamental que propicie la estabilidad y nos permita competir en igualdad de condiciones con fábricas del extranjero”, comentó, haciendo la comparación con otras empresas del exterior si cuentan con ventajas para adquirir materias primas, además de otros incentivos para industrializar dentro de sus fronteras.