Alba Delvalle, alba.delvalle@nacionmedia.com

Al cerrar un año marcado por discrepancias que pusieron en riesgo la soberanía nacional, por un conflicto de aguas compartidas en la hidrovía Paraguay- Paraná con el vecino país Argentina, el diario La Nación/ Nación Media conversó en un especial con uno de los sectores más afectados. El presidente del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos (Cafym), Raúl Valdez, recibió a este medio para contar cómo enfrentó este proceso.

Pero antes se dará a conocer a la persona detrás del liderazgo del gremio. Con 39 años, nacido en Asunción, Raúl está casado con Cecilia y tienen dos hijos: Maxi y Vale. Es Administrador de Empresas por la Universidad Católica de Asunción y cuenta con un MBA en la Universidad de Chile. Le encanta el fútbol y es hincha del club Cerro Porteño. Entre sus aficiones destacó su pasión cervecera, pues es a la vez productor de cervezas artesanales y sommelier de cervezas. Ahora un mano a mano sobre su actividad.

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¿Qué representa para usted liderar un gremio representativo como lo es el Cafym?

–Con 83 años de historia, el Cafym sin duda es uno de los gremios empresariales con más tradición. Se convirtió en un elemento clave para el desarrollo del país desde su fundación, generando condiciones para el crecimiento de la flota mercante nacional, a tal punto de convertirla en la 3.ª mayor flota de embarcaciones fluviales del mundo.

Además, es responsable por el transporte de 80 % del Comercio Exterior del Paraguay. Estamos en un momento en el que la oportunidad de potenciar el crecimiento es exponencial. Para ello, el Cafym debe trabajar en conjunto con el Gobierno para optimizar el sistema y generar las condiciones necesarias para capturar esas oportunidades, esa es mi principal motivación.

Le tocó un mandato particularmente complejo, por el conflicto de la hidrovía Paraguay- Paraná. ¿Cómo afrontó esta situación?

–Efectivamente, y hasta tanto eso no sea solucionado definitivamente dentro del ámbito de competencia, nosotros no podemos descuidar ningún solo detalle. Atender esta problemática requiere invertir enormes recursos y dedicación, sin perder de vista los desafíos que ya estaban en la agenda. Ni hablar de las responsabilidades que cada miembro tiene en sus respectivas empresas.

¿Cómo tuvieron que enfrentar esto institucionalmente?

–Creo que la conformación de un gran equipo de trabajo compuesto por excelentes profesionales fue clave. Destaco la articulación de esfuerzos entre el sector público y privado en el seno de la Comisión Nacional de Hidrovía, liderado por la Cancillería y Cafym. Esto permitió desarrollar una posición muy robusta, firme y coherente en defensa de la institucionalidad y de los derechos legítimos del Paraguay, para garantizar la libre navegación y tránsito de pasajeros y cargas por la hidrovía.

¿Considera que la decisión del cobro del peaje por parte de Argentina pisotea la soberanía de Paraguay?

–Es una grave falta de cumplimiento de un Acuerdo Internacional firmado por 5 países, y la detención de embarcaciones atenta contra el principio fundamental de libre navegación, y lo es aún más grave para un país mediterráneo. El acceso desde y hacia el litoral marítimo es una cuestión de soberanía para nuestro país.

El sector fluvial, un brazo importante para el comercio exterior y la economía del país, ¿qué se debe reforzar en este aspecto?

–Hemos definido cinco pilares estratégicos que marcan la línea de trabajo del Cafym. Instituciones: apoyar al Gobierno para el fortalecimiento institucional de organismos a cargo de los temas de la hidrovía. Leyes: actualización del marco jurídico relacionado al sector de transporte fluvial. Educación: formación y capacitación de tripulaciones y profesionales para atender a la creciente demanda por mano de obra.

El cuarto pilar, bandera nacional: apoyar a la Dirección General de Marina Mercante para generar estímulos para el crecimiento de la flota de bandera paraguaya. Y, finalmente, la consolidación del Plan Maestro de Vías Navegables, que deberá abarcar los aspectos relacionados a la gestión de obras necesarias para mejorar la infraestructura y mantenimientos de vías navegables, cuidado del medioambiente y calidad de vida de poblaciones ribereñas.

“El Cafym es un elemento clave para el desarrollo del país”, sostiene Raúl Valdez, presidente del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos

FORTALECIMIENTO DE LAS INSTITUCIONES

Con todo lo acontecido, ¿cómo calificaría al 2023 para el sector fluvial?

–Creo que fue un año que nos deja muy fortalecidos como gremio. Estoy convencido de que la crisis del peaje trae oportunidades, entre ellas, el fortalecimiento de las instituciones paraguayas a cargo de la hidrovía. Y, finalmente, la oportunidad no solo para solucionar el impasse, sino de integrar, armonizar y coordinar los esfuerzos de los países para desarrollar una hidrovía mucho más eficiente y segura.

Desde el punto de vista empresarial, el 2023 está dejando excelentes resultados luego de 3 años consecutivos que fueron muy malos debido a los diversos eventos como la pandemia, bajos y críticos niveles de agua, y reducción de la demanda por transporte. Creo que este año trae el respiro que requería el sector con urgencia, y así poder encarar el 2024 que luce bastante bien en términos de demanda y niveles de agua.

¿Cuáles son las proyecciones de cierre sobre el volumen de carga que Paraguay moverá este año?

–Estimamos que este año el Paraguay movilizará más de 12,5 millones de toneladas en cargas de exportación e importación, incluyendo los agro-productos, fertilizantes, hidrocarburos y aceites entre otros. Además se transportarán unos 160.000 TEUs (capacidad de un portacontenedores) de diversas cargas contenerizadas tanto export como import. Calculamos que por la hidrovía Paraguay-Paraná se movilizarán más de 25 millones de toneladas en total.

Sobre la gestión del gobierno actual, ¿qué puede decirnos?

–Estamos alineados con la visión del Gobierno. Entendemos que hay muchos y complejos objetivos que solamente serán concretados por medio del trabajo conjunto y alineado entre el sector público y el privado. Tuvimos acercamientos positivos para afrontar los temas relacionados al sector, y nos pusimos a disposición para trabajar, proponer e impulsar las acciones necesarias. Nosotros queremos trabajar en generar los cambios, no solo acompañarlos, y para ello esperamos que se mantenga la dinámica de trabajo entre ambos sectores.

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