Los lazos comerciales históricos entre Paraguay y Argentina tuvieron sus vaivenes a lo largo de décadas. Desde que el vecino país comenzó a devaluar su moneda, el comercio fronterizo en ciudades de Formosa o Posadas fue creciendo exponencialmente. Con el gobierno recién asumido, el presidente argentino, Javier Milei, anunció 10 medidas económicas nuevas para mitigar el déficit fiscal e iniciar un proceso de disminución inflacionaria. Una de esas decisiones fue la devaluación del dólar oficial a 800 pesos argentinos. Anteriormente lo mantenían entre 300 y 400 pesos.
Esta medida financiera hace que se sincere el tipo de cambio oficial para que los sectores productivos tengan incentivos adecuados para aumentar la producción. Según el ministro de Economía, Luis Caputo, se beneficia a los exportadores con un mejor precio y se equipara la carga fiscal para todos los sectores.
PARAGUAY
Las repercusiones e impacto que esto tendrá en nuestro país podría iniciarse en los próximos meses, ya que aumentaría significativamente la importación formal de productos por el tipo de cambio que será ventajoso para comerciantes de nuestro país, explicó a La Nación/Nación Media el economista César Barreto.
“La devaluación del peso es más importante de lo que estimábamos y el ajuste fiscal así como el salto en los precios internos de Argentina serán recesivos para su economía en los próximos meses y el traslado a precios de la devaluación será menor al 100 %. Por lo cual, los productos argentinos serán baratos y aumentará la importación formal a nuestro país afectando negativamente al sector industrial local”, manifestó a LN.
Por eso, aconsejó al Gobierno que observe con detenimiento la situación y tome oportunamente medidas arancelarias y con suficiente flexibilidad cambiaria para mitigar esos impactos en nuestro país. “Esto puede ser importante en los próximos meses y sería conveniente que el Gobierno prevea ciertas medidas arancelarias”, indicó.
Barreto también mencionó que al reducirse sustancialmente los subsidios a los productos argentinos y la brecha cambiaria entre el dólar blue y oficial, prácticamente desaparece o se achica sustancialmente el incentivo al contrabando y las compras fronterizas. “Los importadores y el comercio formal serán beneficiados con esto, pero persiste el riesgo de impacto en la industria local”, reiteró.
Tiempo, factor clave para saber impacto de medidas
Titular del MIC dijo que es difícil aún saber y dependerá de cómo avance la ejecución de las mismas.
El ministro de Economía argentino, Luis Caputo, anunció las medidas económicas que se implementarán de ahora en más en el vecino país. Algunas de ellas tienen que ver con la devaluación del dólar oficial, la no renovación de contratos laborales del Estado, suspensión de pauta oficial a medios de comunicación, reducción de ministerios y secretarías, recorte de la obra pública, reducción de subsidios de energía y eliminación de importaciones SIRA. Para el ministro de Industria y Comercio local, Javier Giménez, parte de estas medidas afectarían positiva y negativamente a nuestro país, pero dependerá de cómo avance la ejecución de cada una de ellas. Aseguró que ve con buenos ojos el cambio político-económico de Argentina con miras a un renacer. “Es difícil aún ver cuáles son las medidas que nos van a afectar. Yo veo con muy buenos ojos que Argentina se potencie, que
sea la Argentina compradora, importadora y pagadora que ahora no es”, dijo Giménez a la 730 AM. Según su óptica, los capitalistas argentinos que venían a Paraguay van a retornar a su país para intentar acomodarse a estas nuevas medidas.
Giménez habló sobre el comercio fronterizo y cómo afecta el flagelo del contrabando a la industria local. Por la dinámica que se observa en el tipo de cambio en Argentina, ya que según Milei la inflación bajaría recién en 18 a 24 meses, en ese tiempo el precio de los productos en la frontera podría aumentar y así disminuir las compras.
Envíos de soja superaron la capacidad local de molienda
Exportaciones a la Argentina equivalen a más del triple de toda la cantidad no aprovechada por la industria paraguaya.
En su reporte de octubre, la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) señaló que el envío de soja paraguaya a Argentina ya superó la capacidad local de industrialización en 3 de los últimos 4 años. De acuerdo con los datos, lo embarcado desde nuestro país a las fábricas del vecino país equivale a más del triple de toda la capacidad no aprovechada por la industria aceitera nacional en este mismo periodo.
“Si una tercera parte de las casi 5 millones de toneladas que fueron a ese destino se quedara dentro del país, la agroindustria local podría pasar a trabajar al tope de su capacidad productiva”, mencionaron. Explicaron que como en la mayoría de los países de la región y el mundo, se busca generar las mejores condiciones para que las mismas se instalen en su territorio sin importar que sus materias primas sean de origen local o extranjero.
“Buscamos aumentar nuestra industrialización de materias primas agrícolas, lo primero en lo que debemos pensar es en ofrecer ventajas a nuestras agroindustrias que les permitan competir en igualdad de condiciones con industrias de otros países”, indicaron. Cappro señaló que es de vital importancia definir una política industrial clara que neutralice o minimice los incentivos que tienen las extranjeras, para que las paraguayas puedan ser más competitivas y opten por dar mayor valor agregado a las materias primas agrícolas que se produzcan en nuestro territorio o se puedan importar bajo un régimen flexible.