El presidente de la Asociación de Casas de Cambios del Para­guay, Emil Mendoza, explicó que sorprendió al mercado cambiario la fuerte devalua­ción del peso argentino pese a la inyección de dólares que tuvieron recientemente. Ante este escenario indicó que comerciantes del vecino país están buscando comprar dólares en nuestro país.

Al arranque del día, el dólar blue en Argentina batió otro récord tras romper con la barrera de los 1.000 pesos al ubicarse 40 puntos por encima, con una diferencia del 190 % con el tipo de cam­bio de referencia. Esta esca­lada arrancó desde la semana anterior y se da en medio de la complicada situación eco­nómica y electoral en el país vecino.

En ese sentido, el presidente de la Asociación de Casas de Cambios del Paraguay men­cionó a La Nación/Nación Media que el mercado cam­biario se sorprendió con este fenómeno debido a que no se estaba esperando, teniendo en cuenta los créditos a los que accedió el país vecino en los últimos meses, lo que representó una inyec­ción importante de dólares. “Hoy se devaluó más del 10 % y eso trajo un revuelo bas­tante grande en el mercado cambiario. Los comercian­tes nos dijeron que ellos no tienen mucha esperanza en el peso argentino, más quie­ren recostarse en el dólar o en el euro, o cualquier otra moneda”, afirmó. Esto generó una alta demanda del billete verde en el país vecino por lo que se dio una escalada importante.

Señaló que ante ese escena­rio, que prevén no tenga cam­bio en el corto plazo, muchos comerciantes argentinos se comunicaron con las casas de cambios de nuestro país interiorizándose sobre los requisitos para poder cam­biar sus pesos por dólares. “Están hablando de cifras muy grandes que creo que ni la banca cambiaria ni la ban­caria no van a poder enfren­tar porque es un riesgo para las arcas del país teniendo en cuenta la volatilidad de esta moneda”, señaló.

Según las principales piza­rras de las casas de cambios, el peso argentino está pisando los G. 6 a la compra y G. 10 a la venta, acercándose de esa manera a un escenario que muchos creían no llegaría: el par entre el guaraní y el peso. Mendoza explicó que gene­ralmente las operaciones de cambio en nuestro país para comerciantes argentinos no son rentables debido a que los impuestos en el país vecino tienen mucho impacto, sin embargo, afirmó que los mis­mos están dispuestos a asu­mir esa pérdida.

“Ellos nos dijeron que eso no importaba porque el riesgo que ellos tienen de devalua­ción es tan grande que no les importan los impuestos, eso nos dejó sorprendidos”, añadió. Señaló que pese a ese complicado panorama en el país, no existen riesgos de fuga de dólares debido a que los controles en las zonas fronterizas están disminu­yendo el nivel de contra­bando, por lo que no se pue­den realizar las operaciones cambiarias en negro.