Desde la Cámara Paraguaya del Gas (Capagas) confirmaron que unos 20 camiones con carga de gas licuado de petróleo se encuentran siendo retenidos por parte de la Aduana Argentina, en la frontera entre Itá Enramada con Puerto Pilcomayo. La situación podría agravarse, teniendo en cuenta que, además del problema comercial, está comprometida la seguridad de las unidades, pues el lugar no dispone de las más mínimas medidas de protección.
Así lo confirmó a La Nación/Nación Media Guillermo Parra, gerente de la Capagas, quien refirió que son cargamentos que llevan parados desde el sábado. “En algunos casos en el sol, a altas temperaturas y eso aumenta terriblemente el peligro, porque la cantidad equivalente es igual a la de una fraccionadora. Hasta puede generarse una explosión en cadena”, comentó. Alrededor de 400 toneladas se encuentran en ruta y hasta el momento se desconoce el motivo de la detención.
Mencionó que las autoridades paraguayas ya se encuentran en contacto con sus pares argentinos para tratar de revertir la situación. Se contabilizan tres emblemas en total, entre ellos camiones de empresas fleteras que transportan combustibles para Petróleos Paraguayos (Petropar). “Yo creo que es una locura lo que están haciendo. Retener camiones de GLP en un lugar donde no hay condiciones”, remarcó. La carga equivaldría unos USD 200 mil a USD 300 mil.
Si bien es muy pronto para hablar de desabastecimiento, esto obligaría a las compañías a desarrollar rápidamente nuevos proveedores, como el mercado boliviano, que cuenta con solo un excedente exportable. “Es peor la incertidumbre, fue sin previo aviso. No se sabe si va a ser temporal o no, además hay contratos de por medio entre empresas de Argentina y Paraguay”, dijo.
El camionero Juan Villalba, señaló que se comunicaron de urgencia con el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Clorinda para que puedan venir a refrigerar uno de los camiones retenidos en la frontera está teniendo un presión de 15 libras y de llegar a 18 libras puede explotar.
También apuntó que sus compañeros camioneros están pasando un mal momento debido a que no tienen más comida, tampoco pueden asearse y la situación se torna crítica, por lo que pide la intención de las autoridades argentinas.