Mavi Álvarez es una de las mujeres que participó el sábado último de la tercera fecha del primer Campeonato Nacional de Albañiles. Es madre de 4 niños y jefa de hogar. Disfruta realizando su trabajo y más aún por haber sobresalido en el rubro pese a las numerosas críticas que recibió desde que empezó a dedicarse a la construcción. En contacto con La Nación/Nación Media, contó que celebra la realización de la competencia entre sus pares, ya que esto hace que la labor a la que se dedican sobresalga y tenga más visibilidad.
“Para mí es algo muy interesante porque como Paraguay necesita agarrar y enfocarse en sobresalir para poder estar en un mercado más amplio. Hay productos de los cuales algunos sabemos y algunos no sabemos cómo utilizar y en estos eventos te enseñan, te explican y te capacitan, aparte de que es divertido”, dijo.
Aun cuando existen diferencias físicas entre un hombre y una mujer a la hora de ejercer la albañilería, Álvarez destacó que hay un gran compañerismo entre ambos sexos a la hora de hacer ciertos trabajos y que al final del día, la calidad del servicio colectivo es lo que se resalta. “El cansancio es un poquito más fuerte para las mujeres, pero porque nosotras tenemos fechas hábiles y en ese caso, yo tengo más apoyo de los varones porque ellos se dan cuenta de por qué podemos estar así (ciclo menstrual) y me pasan la mano para no sobrecargarme”, expuso. Acerca de cómo encuentra la unión entre los quehaceres de la casa, el cuidado de sus hijos y a la vez sustentar su hogar, afirmó que no es fácil pero que mediante la tecnología, por videollamadas, intenta siempre estar cerca de sus hijos y organizar su casa.
Además de que cuenta con el apoyo de los maestros de sus niños, su familia e incluso vecinos. “Gracias a Dios, hoy día la tecnología nos ayuda con una videollamada para agarrar y organizar otra vez la casa. Pero es difícil, porque yo sí tengo que estar pendiente de mi casa al mismo tiempo.
Para cualquier mamá común que vive en su casa es fácil decir, le dejaste a tu hijo y le puede pasar cualquier cosa y yo tengo que trabajar con esa frustración encima mío”, se sinceró. El impulsor de la competencia Enrique López Arce dijo que la tercera jornada se vivió con muchas emociones y expectativas de lo que será la gran final. “Estamos muy contentos, el próximo sábado es la gran final, con esto demostramos que el trabajador paraguayo está a la altura y que busca capacitarse, busca desafíos y sobre todo quiere esforzarse por amor a su familia”, expresó.