La estrepitosa caída del peso argentino genera preocupación y efectos negativos para el comercio de frontera no solo de Paraguay, sino de los demás países de la región. Referentes del sector comercial indicaron que se registra una “contundente caída” de las ventas. La situación argentina empeora su efecto negativo sobre el comercio de frontera y, según los referentes, ya se traduce en una reducción de las ventas. “No tenemos estadísticas, pero te puedo decir que existe una contundente caída de las ventas”, dijo Conrado Kiener, presidente de la Cámara de Comercio de Encarnación.
Acotó que el panorama para el comercio es caótico para todas las ciudades de frontera con la crisis económica en el vecino país que derivó en una fuerte devaluación del peso, situación que no se puede retener. Desde la semana anterior, tras el cierre de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO), el peso argentino llegó a G. 7, nivel nunca antes visto y que obliga a los comerciantes de frontera a generar condiciones de subsistencia debido a que no se pueden generar ganancias. Actualmente, según Kiener, se desalentó la compra en la ciudad paraguaya atendiendo a que resulta más competitivo para las personas cruzar la frontera y realizar compras en exceso en la ciudad vecina argentina. “Con el peso a este valor, nadie quiere vender”, dijo y explicó que también incidió en el margen de ganancia de los comerciantes.
Añadió que existe un fenómeno en la Argentina en donde las personas se atesoran con el guaraní como un medio de ahorro, mientras que también existe un desaliento en los argentinos para realizar las compras en pesos atendiendo a que les resulta más caro comprar de acá.