- Por Alba Delvalle.
Los principales sectores económicos del país, expectantes ante la asunción del nuevo gobierno, compartieron con el diario La Nación/Nación Media sus apreciaciones respecto a los desafíos considerados como prioritarios que se deben encarar tanto en los aspectos generales que competen al país, así como a los más específicos.
Para el presidente de la Cámara Vial Paraguaya (Cavialpa), Paul Sarubbi, las nuevas autoridades deben afrontar la gestión con políticas de Estado, previsibilidad en las inversiones y, sobre todo, seguir la línea de crecimiento económico. “Lo más importante en este momento para el país es seguir con la línea de crecimiento de la economía. Paraguay tiene demasiado potencial, pero le falta algunos detalles para verdaderamente incentivar la inversión privada”, expresó.
En lo que respecta a su sector específicamente, mencionó que el país tiene un déficit de infraestructura muy grande, de unos USD 30.000 millones estimados para desarrollarse, pues el nivel de inversión anual ronda los USD 1.000 millones, y la ejecución de este 2023 está dejando mucho que desear, por lo que se cree que apenas llegaría a los USD 600 millones, dijo.
Esto también requiere de previsibilidad en los volúmenes de inversión, pues en algunos años se inyectan muchos recursos, que para cumplir con los proyectos, las empresas también se abastecen de maquinarias y personales, que no pueden al siguiente año simplemente deshacerse de estos recursos, sentenció.
Y es aquí que se evidencia que el Paraguay no tiene una política de Estado que perdure en el tiempo o al menos a 20 o 30 años que puedan ser renovables, pues por años viene ejerciendo políticas de gobierno que solo cambian las estrategias.
ALTAS EXPECTATIVAS DE MEJORA
La Cámara de Anunciantes del Paraguay (CAP) también aportó con sugerencias que esperan sean tenidas en cuenta por el presidente de la República. “La expectativa es muy alta, eso se nota porque el mercado está muy parado, por eso le reiteramos al nuevo gobierno las peticiones que venimos impulsando como la calidad del gasto público, la caja fiscal y mano dura al contrabando”, indicó a este medio la presidenta del gremio, Patricia Toyotoshi.
La CAP insiste en que se debe apuntar a mejorar la calidad del gasto público, en coincidencia con Cavialpa, por lo que ven con buenos ojos la fusión de las instituciones recaudadoras y esperan que se pueda llegar a niveles de eficiencia. Otro aspecto transversal a varios sectores es el tema de la caja fiscal que sí les preocupa bastante, lo cual ya hablaron con algunas de las nuevas autoridades y esperan que se ocupen de estos aspectos.
Y como tercer pronunciamiento, la CAP remarcó que el factor del contrabando que requiere de mayor trabajo en conjunto de las diferentes entidades públicas, para lo cual también se ponen a disposición para apoyar con acciones que sean precisas para combatir este flagelo que permea con la informalidad, además de perjudicar los ingresos fiscales, acotó.
COMBATE AL CONTRABANDO
A su vez, el presidente de la Unión Industrial Paraguaya (UIP), Enrique Duarte, compartió con La Nación/Nación Media las prioridades para el sector industrial, que se garanticen la previsibilidad y seguridad jurídica, la generación de más políticas públicas enfocadas a la industria y combate al contrabando. “La seguridad jurídica, la fortaleza institucional, el respeto a la propiedad privada y la estabilidad política, son condiciones necesarias e imprescindibles para generar un buen clima de negocios, que atraiga inversión generadora de empleo formal. A eso llamamos previsibilidad”, subrayó.
Como industriales claman por más políticas públicas enfocadas al sector, pues ningún país pasó de tener una economía basada en las materias primas a una verdadera sociedad del conocimiento, sin antes haber desarrollado y diversificado su industria. Y si bien Paraguay dio un gran salto en la última década, se requiere la articulación de medidas de incentivo que abarquen todos los aspectos vinculados a este sector de la economía.
Y como ya lo anticipó Toyotoshi, una problemática que golpea a varios sectores, el contrabando sigue siendo el principal enemigo del desarrollo nacional, pero a la vez, un enorme desafío que aún no se puede erradicar. Esperan igualmente que la creación de la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios propicie eficacia en la lucha contra este flagelo, aportó Duarte.