Los envíos de carne vacuna volvieron a caer en julio, pues al séptimo mes del año se registró un 16,8 % menos en ingresos para nuestro país. De enero a julio de este año las exportaciones generaron USD 935 millones, en comparación a los 1.125 millones de 2022, lo cual representó USD 190 millones de diferencia en las salidas al exterior.
De acuerdo al último boletín emitido por el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) el volumen embarcado totalizó 216.563 toneladas de la proteína roja, lo cual significó una reducción del 7,4 %, pues en el mismo periodo del año pasado se habían comercializado 233.876 toneladas a los diferentes destinos.
De los 50 mercados que se tuvieron este mes los principales destinos del complejo cárnico situaron a Chile en primer lugar, que se llevó el 41 % al adquirir 74.164 toneladas, Taiwán le siguió con el 14 % comprando 24.816 toneladas, Brasil obtuvo el 10 % con 16.881 toneladas, y Rusia ocupó la cuarta plaza representando el 8 % del total con 17.003 toneladas. Así también, Proveeduría Marítima ocupó el 5 %, Israel 4 %, la Unión Europea el 3 %, y otros mercados 14 %.
Según el reporte de la institución veterinaria, los embarques de menudencia bovina tuvieron un repunte del 2,8 %, y nuevamente una caída en el monto, tal como se había reportado en el mes de junio. Se comercializaron 34.342 toneladas por USD 54 millones frente a las 33.402 toneladas que permitieron el ingreso de USD 68 millones.
Hay que mencionar que en el marco del proceso para la futura apertura del mercado de la carne bovina a Estados Unidos y Canadá (recientemente habilitado para la importación de carne vacuna paraguaya) el presidente del Senacsa José Carlos Martin viajó a estos países, donde se reunirá con distintas autoridades internacionales para conocer sobre el estado de los procesos e impulsar la promoción de la carne paraguaya.