- Por Rodrigo Volpe Cattoni
- Abogado y jefe del Departamento Jurídico de Conatel (*)
Si eres de los que se preocupan que, repentinamente, tu televisión deje de funcionar debido al famoso “apagón analógico” del que tanto se habla, este artículo es para vos. Básicamente, el apagón analógico es un proceso mediante el cual las emisoras de TV dejan de transmitir señales analógicas y comienzan a transmitir únicamente señales digitales. A diferencia de la analógica, los estándares de televisión digital permiten que las señales lleguen con mayor calidad y nitidez a los hogares y no se degraden a pesar de las trayectorias que deben recorrer.
Justamente, para poder viajar desde el lugar donde se producen hasta los hogares y establecimientos, las señales de televisión utilizan el espectro radioeléctrico (que es donde entra el regulador, es decir, la Conatel), una suerte de autopista intangible. Este recurso también hace posible el funcionamiento de internet.
Los sistemas de televisión nacional siempre han usado las bandas de VHF (Muy Alta Frecuencia) que se corresponde con la banda del espectro electromagnético que ocupa el rango de frecuencias de entre 30 y 300 megahercios y UHF (Ultra Alta Frecuencia) para esparcir sus señales. Con la migración al estándar digital, este espectro quedará libre y podrá ser usado para el despliegue de redes de nuevas tecnologías.
Una de las ventajas de la TDT o Televisión Digital Terrestre es justamente esta, que ocupa menos espectro radioeléctrico, por lo que es posible aprovechar dichas bandas de alta y baja frecuencia para expandir y mejorar las redes móviles de telecomunicaciones, mediante las cuales las personas se comunican, se conectan a internet, hacen transacciones electrónicas, transferencias y comercializan en línea. Es justamente por eso que el apagón analógico es un proceso tecnológico que beneficiará a los usuarios de múltiples maneras: en primer lugar, hará posible que reciban mejor calidad de sonido, imágenes con un alto nivel de calidad y resolución, y contenidos con interactividad, sin que el bolsillo de la gente tenga que sufrir absolutamente en nada.
Por ejemplo, si cuentas con una pantalla plana o recientemente cambiaste tu televisor, probablemente será compatible con la televisión digital. Pero si tu aparato es más antiguo, tampoco tendrás que comprar otro de inmediato, pues podrá recibir las señales digitales con un decodificador. La otra cuestión favorable es que a mayor tecnología, mayor oferta, es decir, el avance tecnológico hace que se reduzcan los costos de producción, lo cual causará que se produzca más en los diferentes precios, encontrando ofertas accesibles para todos los niveles. Otro de los puntos favorables y de suma importancia es que, además, la liberación de frecuencias en dichas bandas permitirá que los operadores móviles desplieguen sus redes en más lugares del país, especialmente en las zonas rurales o de difícil acceso, pues este espectro es idóneo para una amplia propagación de señales.
Luego de haber dado el primer paso; es decir, logrado el apagón analógico, el siguiente estadio nos encaminará firmemente a la era tecnológica, por considerar que este suceso será la puerta de ingreso para Paraguay a la era de las tecnologías.
MOTOR CLAVE
La tecnología es un motor clave del crecimiento económico en países y ciudades. Las innovaciones tecnológicas en economía permiten aumentar la producción y eficiencia en bienes y servicios, lo que se traduce al final en prosperidad. Sin embargo, las herramientas y palancas a través de las cuales nace, se adaptan y aplican para la producción de una economía más tecnológica, son complejos y difíciles de cuantificar.
Para intentar reducir estas brechas de conocimiento, la Unión Europea ha desarrollado una metodología para ayudar a comprender mejor cómo las tecnologías y la digitalización ayudan a transformar las economías de la eurozona. Estas estadísticas, recogidas en los informes ‘Digital Economy and Society Index (DESI)’, puntúan a los estados por su conectividad, capital humano, uso de internet, integración de la tecnología digital y servicios públicos digitales. En el año 2021 en la Unión Europea, una de las grandes brechas en digitalización y acceso a la tecnología se producía por el tamaño de las empresas. Mientras que el 88 % de las grandes compañías presentaban un nivel básico, alto o muy alto de intensidad digital, esta cifra se reducía hasta el 55 % entre las pymes.
Nos referimos a las pymes, en este caso de la Eurozona, para trasladar este dato a nuestra realidad, porque justamente estas son el motor de la economía nacional, representan en Paraguay un alto porcentaje de la industria, el comercio y los servicios, así como en la cantidad de trabajadores; sin embargo, se encuentran por debajo en los ingresos y las remuneraciones pagadas y una de las causas es la carencia de recursos para la internacionalización. Justamente, el camino para acortar estas brechas o abordar de una manera efectiva la internacionalización sería tomar el camino de las Smarts Technologies, que son las más modernas y, en cierta medida, son consideradas estratégicas por la Unión Europea como, por ejemplo, la Inteligencia Artificial y el Internet de las Cosas, que dotarán a estas pequeñas empresas de las innovaciones necesarias para dar el salto de calidad que necesitan para llegar a los objetivos deseados.
TECNOLOGÍA 5G
En el mismo sentido y a nivel regional tenemos a Uruguay, que acaba de entrar en la era 5G; la tecnología de conectividad móvil de quinta generación ya está en Uruguay, de la mano de Antel (Administración Nacional de Telecomunicaciones de Uruguay), refiriendo al respecto que, esta nueva tecnología, es algo más que telecomunicaciones: “Es el futuro del crecimiento del Uruguay”.
El presidente de la Antel, Gabriel Gurméndez, expresó que “el 5G es llevar la vida actual a un nivel más allá. Es el futuro, un mundo nuevo, el primer mundo, pero que ya está acá, en el Uruguay. Es el futuro del trabajo, del fuerte impacto en la educación, en la salud, en la seguridad, en cómo van a funcionar las ciudades. Pero también estamos hablando de exportar nuestro trabajo, de exportar nuestro talento, y, fundamentalmente, que los jóvenes uruguayos encuentren su destino acá”.
Por todo esto y en consonancia con nuestro par del Mercosur, tomemos el desafío de llevar al Paraguay a los primeros puestos de conectividad regional, despliegue de redes de internet y a la digitalización de sus servicios públicos, convoquemos a los agentes en proyectos ágiles y de fácil ejecución, bajo la cooperación y colaboración público-privada. Esto traerá consigo un abanico de posibilidades para todas las pymes, para las grandes empresas, como para todo tipo de emprendedores, que finalmente se traducirá en mayor prosperidad para todas las familias paraguayas.
(*) Abogado, egresado de la Universidad Católica “Nuestra Señora de la Asunción”, especialista en Derecho Procesal Penal por la UniNorte. Funcionario público con trayectoria de 29 años. Actualmente jefe del Departamento Jurídico de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones. Cuenta con varios cursos de posgrados y especialización en el campo del Derecho y las tecnologías (UBA, Universidad de Salamanca, Harvard, Cambridge).