A menos de un mes de la aparición del primer caso de influenza aviar (IA) de alta patogenicidad en la Argentina, el nivel de mortandad ya asciende a las más de 230.000 gallinas en varios establecimientos de distintas provincias del vecino país, en su mayoría sacrificadas para evitar la propagación del virus. Hay que recordar que en fecha 15 de febrero se confirmaba el primer caso positivo de IA en un ave silvestre en la provincia de Jujuy, específicamente en un cisne negro, que luego trascendió a las aves de corral o traspatio, y se fue propagando hasta llegar a 10 provincias.
Conforme al último reporte actualizado del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), hasta la fecha del 9 de marzo Argentina presenta 40 casos confirmados con positivo de la gripe aviar, de los cuales 32 fueron en aves de traspatio, 4 en silvestres y 4 en el sector comercial.
En tanto que las provincias afectadas son Córdoba con 16 y es el de mayor número de casos, en Buenos Aires se registraron 9, en Neuquén 4 al igual que en Santa Fe, en Río Negro 2 casos, y las restantes como en el Chaco, Jujuy, Santiago del Estero, en San Luis y en Salta se mantienen con 1 caso cada una, respectivamente.
El Senasa indicó que todas las muestras analizadas el día de ayer por su Laboratorio Nacional arrojaron diagnóstico negativo a influenza aviar (IA) H5, de un total de 200 notificaciones analizadas ya desde el inicio de la infección.
ZONAS DE AVES SACRIFICADAS
Con relación a las aves sacrificadas, según los sitios digitales del vecino país, solo en un establecimiento avícola de Mainqué, provincia de Río Negro, unos 200.000 pollos parrilleros murieron, por un lado los infectados y también los que debieron ser sacrificados por cuestiones sanitarias. Según el propio Senasa, en dicho establecimiento operaban 10 galpones con 20.000 aves en cada uno, y con la infección no se pudo mantener vivo a ninguno de los animales.
Así también, en la provincia de Neuquén, en Senillosa, unas 11.000 gallinas ponedoras fueron sacrificadas; al igual que en Mar del Plata, en la zona del paraje La Polola, se sacrificaron a 20.000 aves, pero se aclara que si bien es alto el número de aves muertas, no todas tienen que ver con una infección o contagio, sino más bien por la prevención de expansión.
Diseñan planes para enfrentar
Países del Cono Sur se reunieron para analizar la gripe aviar en la región.
Mediante la creación de una comisión técnica sobre influenza aviar altamente patógena, los países del Cono Sur de América acordaron analizar una respuesta regional conjunta a la presencia del virus y a aspectos vinculados con el intercambio comercial de productos aviares. Así definió la reunión del Comité Veterinario Permanente (CVP) del Cono Sur que culminó ayer. Contó con la presencia de autoridades y profesionales de los servicios veterinarios de Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Paraguay y Uruguay.
Estuvo encabezado por Javier Suárez, director general ejecutivo del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) de Bolivia, quien ejerce la presidencia pro tempore del CVP, y evaluó estrategias de sanidad animal a nivel regional en general, aunque la mayor atención estuvo centrada en el tema de influenza aviar de alta patogenicidad que ingresó a la región en diciembre en Chile, y se detectó luego a fines de enero en Bolivia y en febrero en Argentina y Uruguay.
“Entendemos que la influenza aviar llegó a la región para quedarse como ya sucede en otras regiones del mundo, por lo que decidimos pedirle a la regional americana de la Organización Mundial de Sanidad Animal que organice un seminario taller en el que diserten expertos mundiales con perfil de campo, que nos brinde el reaseguro del conocimiento científico y el expertis en el terreno, con el fin de elaborar estrategias certeras para enfrentar esta enfermedad”, expuso el vicepresidente del Senasa, Rodolfo Acerbi.