Con el fin de seguir creciendo en la producción de miel orgánica, pequeños productores de Fuerte Olimpo, en el Chaco paraguayo, conservan más de 500 hectáreas a través de la elaboración de miel y en los últimos años la comunidad produjo anualmente unos 5.000 litros a pesar de los incendios forestales en la región.
Para este 2023, los mismos cuentan con un primer objetivo: cosechar 3.000 litros de miel que se colocarán en el programa de merienda escolar en Alto Paraguay, además de comercializarse y enviarse a distintos puntos del país, según informaron desde la Unión de Gremios de la Producción (UGP).
Por su parte, Nery Desvars, coordinador de la Asociación de Apicultores Eirete Pantanal, dijo a la UGP que actualmente son entre 25 y 30 las familias que generan ingresos a través de la apicultura, conformados por lugareños y productores de pueblos originarios.
Desde la UGP detallan que el rubro se inició mediante la difusión de los conocimientos y valores ancestrales del pueblo indígena ishyr que identificó el káva rape (ruta de la abeja), donde se colocan las cajas trampas para las abejas y así producir con el mínimo impacto en el medioambiente.