Técnicos de la Agencia Canadiense de Inspección de Alimentos (CFIA) junto a autoridades del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) dieron inicio a la auditoría para la inspección de la carne paraguaya, el martes último. La reunión se llevó a cabo de forma virtual. El titular del Senacsa, José Carlos Martin, en conversación con La Nación/Nación Media, precisó que el proceso de análisis de parte del gobierno de Canadá comenzó en marzo del 2020 y las primeras documentaciones requeridas fueron enviadas, y atravesaron por un favorable análisis de riesgos sobre Paraguay.
En ese marco, expuso que desde el 28 de noviembre se inició un nuevo proceso que irá hasta el 21 de diciembre, en el que se realizará una auditoría de todos los sistemas de gobernanza del Senacsa que incluye al sistema de laboratorio, sanidad animal, visita a industrias, frigoríficos, y establecimientos. “Después habrá un proceso de evaluación de documentos que va a tardar entre 6 y 8 meses, esto tarda mucho. Es por la exigencia del mercado, los cambios y diferentes cosas que te piden que hagas. También requiere presupuesto y un tiempo de implementación”, explicó y contó que la apertura de Taiwán para la carne porcina paraguaya tuvo una duración de 4 años. “Comenzó en octubre del 2018″, recordó.
El presidente de la entidad estatal reveló que parte de la inspección es visitar frigoríficos locales. El mismo expuso que por cuestiones de seguridad no puede revelar cuáles son, pero sí que son cinco industrias distribuidas por todo el país, recorrido que comenzará el próximo 5 de diciembre hasta el 15 del mismo mes. Mientras tanto, se realizan gestiones documentales.
Para el Senacsa genera “plena satisfacción” el hecho de que Canadá se haya fijado en Paraguay, ya que hoy en día el mercado de carne bovina es altamente competitivo, por lo que el titular del ente aseguró que se realizará el mayor de los esfuerzos para abrir paso a la exportación. “Canadá nunca vino a Paraguay; entonces, nos sentimos muy satisfechos porque ellos se interesaron en nosotros. Ya pasamos el análisis de riesgos y siempre hay que mirar el vaso medio lleno al respecto de esto para sentirte satisfecho”, dijo. Acotó además que el país norteamericano importa cerca de 200.000 a 210.000 toneladas por año y mencionó que “vamos a seguir peleando para traer más y mejores mercados, porque el mundo necesita mercados pero también nosotros necesitamos adaptarnos”.