Mucho se habla de que Paraguay es un país ideal para las inversiones. En un reciente evento internacional en el país hasta el propio presidente del BID recomendó a inversionistas optar por radicar sus operaciones, pero la interrogante es qué hace falta para que se traduzca en apuestas concretas y de calidad.
En el debate de Desarrollo en Democracia (Dende) abordaron aspectos tales como cuáles son los pasos para crear el escenario favorable para las inversiones de cara al desarrollo y la inserción de Paraguay en el mundo. El viceministro de Industria, Francisco Ruiz Díaz, y Jaime Eguez, presidente del Club de Ejecutivos, coincidieron en que Paraguay debe aprovechar mejor sus ventajas competitivas.
Ruiz Díaz destacó las reformas estructurales implementadas en el 2003 que dieron sus frutos, pero hay dos desafíos, interno y externo, que deben ser pasados para atraer mayores inversiones. Uno es la necesidad de garantizar el acceso a mercados y para ello se debe continuar el proceso iniciado por el Ministerio de RREE de profundizar relaciones con otros países.
El Mercosur capta el 80% de las exportaciones de manufactura, por lo cual insistió en la necesidad de que el cuerpo diplomático ahonde en la diversificación de países que permitan el ingreso de productos paraguayos. Mientras Eguez reconoció que Paraguay logró robustecerse en los últimos 20 años en diferentes instancias con un liderazgo muy fuerte, producto de la profesionalización en el Estado y una previsibilidad en varios estamentos, pero el sector político debe generar espacios y el Congreso acompañar este desafío.