La economía paraguaya posiblemente cierre el 2022 con un resultado negativo, a pesar de que el Banco Central del Paraguay (BCP) se mantiene optimista y prevé una expansión del 0,2%, golpeada por una fuerte sequía que redujo la producción. Se espera un efecto rebote para el 2023, aunque si se vuelve a presentar otra sequía, la economía podría estar nuevamente golpeada, por el lado de las exportaciones.
Miguel Mora, economista jefe del BCP, indicó que el evento climático implicó una importante reducción de producción, principalmente en los productos primarios de exportación, como la soja. “Lógicamente, el resultado de una menor producción se observa en el reporte de comercio exterior y posiblemente se seguirá viendo durante todo el año. Esto considerando que casi toda la producción ya fue exportada, y en un menor volumen por la caída de la producción”, dijo.
En tanto, acotó que para la siguiente campaña agrícola siempre es un factor de riesgo la sequía, por lo que si es que se da, podría afectar principalmente a las exportaciones del 2023, considerando que la soja se empieza a cosechar a inicios del año que viene. Sin embargo, Mora dijo que según conversaciones con el sector, la sequía que se tuvo en la campaña agrícola anterior (2021-2022) fue una de las peores desde que se tienen registros. “Según miramos en el pasado, no se produjo todavía dos años de sequía consecutivas, lo que es algo que puede calmar. Se observó en el 2009, con recuperación en el 2010.