Con la aprobación de Paraguay ante el Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat), el país no ingresa a la “lista gris” y por tanto se abre un panorama más alentador a nivel económico, al que se suma la decisión de la calificadora internacional Moody’s de elevar la perspectiva del país de estable a positiva.
Pero, también es importante analizar una situación contraria y es lo que hizo el economista y ex presidente del Banco Central del Paraguay (BCP), Carlos Fernández Valdovinos, quien aseguró que, “básicamente, si no pasábamos íbamos a ser un país paria”.
“Desde el punto de vista financiero, en los mercados internacionales, quedaríamos casi aislados, con muchas dificultades para hacer negocios tan simples como remitir dinero para pagar por maquinarias o alimentos que el país precisa importar”, expresó el experto.
Ser parte de la lista gris del Gafilat también puede perjudicar al pago de los ingresos de divisas por las mercaderías exportadas, como la carne o la soja, por lo que al ser parte de esta temida terna, el país hubiera quedado bajo una lupa muy intensa ante cualquier tipo de transacción financiera que realice, agregó.
Sería como una señal pésima, que califica de país no cooperante en términos de prevención de lavado de dineros, generando esto muy pocos incentivos para inversionistas de radicar apuestas, lo que termina en una complicación para la generación de puestos de trabajo, que es lo que brinda cierto bienestar económico, explicó Valdovinos.
PANORAMA ALENTADOR
Es así que, “por donde se lo mire, creo que esta ha sido una noticia fantástica desde el punto de vista económico, que se complementa con la calificación de Moody’s de país estable a positivo y se refuerza nuestro panorama alentador a futuro si empezamos a hacer bien algunas cosas”. El ex titular del BCP remarcó que esto debería ser un paño de humildad para todos aquellos que dicen que Paraguay es un desastre en cuanto a la prevención del lavado de dinero, pues se demuestra que se realizó un muy buen trabajo interinstitucional, tanto en el sector público como en el sector privado.