Desde el 1 de julio entrará en vigencia el nuevo salario mínimo, que tendrá un incremento de 11,4%. El reajuste salarial incidirá positivamente en el ingreso de los consumidores, quienes recuperarían su capacidad de compra perdida durante el año.
La consultora Mentu indicó que en el largo plazo el incremento podría tener tres principales variables de ajuste: el precio de los productos, el empleo o el margen de utilidad de las empresas.
Los analistas de la consultora explicaron que mediante el Decreto N° 7270/22 el Poder Ejecutivo dispuso el incremento de 11,4% del salario mínimo, según lo recomendado por la Comisión Nacional de Salario Mínimo, que al cierre del primer semestre de cada año analiza el ajuste del salario considerando la inflación interanual. Este ajuste es el mayor en 16 años, cuando el salario se incrementó 12% en el 2006, según datos del BCP.
El salario mínimo pasará de G. 2.286.324 a G. 2.550.307 mensuales a partir del próximo viernes, lo que según fuentes oficiales beneficiaría a aproximadamente 400.000 personas; es decir, al 12% de la población ocupada.
Este reajuste alcanzará a unos 400.000 trabajadores del mercado, señaló Karina Gómez, presidenta del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (Mtess). Con base en el reporte del BCP, se infiere que la variación será de alrededor de G. 260.000, para alcanzar un sueldo piso de unos G. 2.550.000 para actividades no especificadas.